Samanta Villar, conductora de "La vida con Samanta" y mamá de 2, dice que "idealizamos" ser madre
Viviendo en carne propia experiencias increíbles la Villar relató crudamente una gran verdad.
La periodista catalana, Samanta Villar, conocida por no callar nada y ser siempre una fuente transparente de noticias y opiniones, tiene un nuevo tema para hablar.
Con una nueva enseñanza de vida como lo es la maternidad, no dudó en hablar sobre ello y lo que para ella ha significado.
UNA MUJER VERSÁTIL
Villar vuelve con más fuerzas para hacerse cargo de su programa “La Vida de Samantha”, y para arrasar con su libro titulado “La carga mental femenina”, todo como aniversario número 10 de su llegada a Mediaset.
Ella mostró ser una mujer imparable y polifacética pues no ha tenido dormir en cartones para cubrir su pasión por el periodismo y la verdad.
También se ha adentrado al mundo de la pornografia durante 21 días para dar su versión de los hechos como lo ha hecho siempre. A pesar de esto, admitió haber rechazado unos cuantos trabajos pues entre tantas ocupaciones no duda en dejarse tiempo para ella misma.
Como una mujer autosuficiente y consciente de sí misma se conoce a la mujer, porque aunque le gusta tirarse más responsabilidades encima de las que puede cargar ha aprendido a decir que no.
No es para menos que se considere a sí misma feminista pues admitió haberse dado cuenta de la desigualdad en muchos aspectos y no piensa pasarlos por alto, es por eso que se inspiró para el libro.
LA MATERNIDAD PARA UNA MUJER SINCERA Y SIN PENA
Al final decidió experimentar en un campo al que no se había atrevido a ir antes, en el 2016 decidió convertirse en madre por medio de la reproducción asistida.
En base a estas vivencias decidió desmitificar el panorama idílico que se pinta en torno a la maternidad.
Explicó cómo constantemente los medios están dramatizando la maternidad con imágenes positivas y por ello las verdades incómodas prefieren ser calladas por las madres con temor a lucir desnaturalizadas.
Claro que esto no siembra en ella sentimientos negativos respecto a sus gemelos, pues no se arrepentiría de haberlos tenido. Gracias a ellos y agregando que los ama, tiene a su disponibilidad información verídica sobre el proceso materno.
Toda ocupación nunca la alejado de sí misma pues ha tomado en cuenta lo mucho que la ha envejecido y a manera de compensación ha optado por maquillarse y ser su propia terapeuta en momentos de angustia.
SUS DUROS INICIOS
Para llegar al lugar tan importante en el mundo del periodismo que actualmente Samanta Villar ocupa tuvo una difícil comienzo.
Hace 10 años ya de su llegada a Mediaset para convertirse en pionera del periodismo vivencial. Sin maquillaje u ayuda de cualquier tipo de intermediario su intención era transmitir los hechos sin ningún filtro.
A sus 33 años y con base de “no es lo mismo contarlo que vivirlo”, dejó claro que no había reto que se le resistiera. Venció a sus miedos, se enfrentó al pánico que le producía trabajar en una mina.
También luchó contra las barreras que tienen que sortear cada día las personas invidentes. Todo ello con ese punto de naturalidad y cercanía que caracteriza, reseñó Telecinco.