Dos perros llamaron al 911 más de una docena de veces tras dueños dejarlos solos en casa
Si bien sabemos que los perros pueden comunicarse a través de la mirada y con gestos, nunca antes se había reportado que realizaran una llamada telefónica ¡y por al número de emergencia!
Dos perros llamaron al número 911 más de 17 veces después de que sus dueños salieran de casa y los dejaran solos. La información fue confirmada por la policía de Lakeville, Minnesota en Estados Unidos.
Los encargados del despacho de emergencias estaban consternados ya que el teléfono no paraba de sonar y, cada vez que atendían la llamada, solo se escuchaban los ladridos 'Remy' y 'Bomber' al fondo, situación que mantenía a los servidores con más preguntas que respuestas.
Perro con la boca abierta. Fuente: Shutterstock
"Nos reportaron una llamada de emergencia al 911 en una vivienda en Lakeville y acudimos a ver que sucedía. Tocamos el timbre varías veces pero no había nadie”.
“Estábamos por irnos cuando nos informaron que habían entrado otras 16 llamadas del mismo número en esa casa", dijo el agente, Michelle Roberts, del Departamento de Policía de Lakeville.
Perro con un celular. Fuente: Shutterstock
Frente a esto, el oficial Roberts se puso en contacto con el propietario y entró a la casa a través del garaje.
Al subir a una de las habitaciones se encontró con dos perros y el teléfono celular del propietario quien había salido de casa.
La Policía dijo que el teléfono estaba activado solo en modo "llamada de emergencias" por lo que los perros llamaron al presionar la tecla con sus patas. Por fortuna, todo quedó en un simple malentendido.
Las travesuras de los perros pueden ser muy divertidas, como peligrosas. En otra historia, un perro intenta hacerse invisible tras destruir álbumes de fotos de dueña.
Daisy Moore, como la llamaba su dueña en el video, cerraba los ojitos, tal vez para tratar de desaparecer del gran desastre que ocasionó.
La perrita acabó con los álbumes de fotos de la señora, llenando todo es espacio de retratos destrozados.
La filmación es tan graciosa debido a que la mascota, que esperaba sentada en el sofá de la sala con su cola moviéndose de un lado para el otro, escucha atentamente los reclamos de su dueña, quien le repetía: “¿Esto es una broma?”.