Médicos rompen el silencio sobre el cáncer de Ami Brown, incluida la "quimioterapia con radiación"

Los médicos de Ami Brown hablaron sobre la valiente batalla contra el cáncer que soportó la matriarca de "Alaskan Bush People” (Alaska: hombres primitivos).

Con solo un tres por ciento de posibilidades de supervivencia, Brown desafió las probabilidades de vencer a la enfermedad que amenaza su vida.

Su lucha fue expuesta ante el mundo en forma de episodios televisados, y se enfrentó a muchas críticas en Internet por parte de personas que afirmaban que su diagnóstico era falso para hacer el drama televisivo.

Sin embargo, los expertos médicos que trabajaron en la recuperación de Brown ahora han revelado la naturaleza crítica de su enfermedad y su lucha.

Sus doctores en el Centro Médico de UCLA confirmaron que en abril de 2017, Brown fue diagnosticada por primera vez con cáncer de pulmón de células no pequeñas en estadio III.

“La terapia para su cáncer incluyó un tratamiento de cuatro meses de quimioterapia con radiación. Su enfermedad respondió bien al tratamiento y, según su oncóloga de UCLA, la Dra. Deborah Wong, ahora está en remisión", reveló una declaración de los médicos.

El comunicado además decía que las recientes exploraciones de Brown no muestran evidencia de cáncer. Sin embargo, el equipo médico la supervisará continuamente de cerca durante los próximos meses.

La fuente también informó que la familia ha dejado su hogar rural en Alaska, y actualmente vive en su nuevo rancho en el estado de Washington para asegurarse de que Brown pueda regresar fácilmente para sus chequeos de rutina.

El esposo de Brown, Billy, también le dijo a la fuente que la familia está muy bien emocionalmente, mientras esperan muchos años más de unión.

Siguiendo los pasos de la pareja, sus hijos también están buscando una vida feliz con sus respectivos compañeros de la vida real.

Mientras tanto, TV Over Mind informó que Brown inicialmente creía que su cáncer era un caso de artritis. Sintió un fuerte dolor en la espalda y creyó que era el resultado de un esfuerzo. Cuando esto fue seguido por falta de aliento, asumió que era el resultado del frío y la vejez.

Finalmente, fue su dentista quien insinuó que sus problemas podían ser mucho mayores. Durante su visita al odontólogo para obtener nuevos dientes, el examen sugirió que podría haber desarrollado cáncer.