Madre de migrante salvadoreño que murió con su hija en el río Bravo: 'Murió intentando salvarla'

La madre desconsolada recuerda que le pidió a su hijo, Óscar Martínez, que no se fuera a Estados Unidos.

El 3 de abril, Óscar Alberto Martínez Ramírez, de 25 años y Tania Vanessa Ávalos, de 21, salieron con su bebé de 21 meses, Valeria rumbo a EE.UU. Óscar Martínez decidió irse a Estados Unidos con el objetivo de comprar una casa para sus familiares y salir de la pobreza.

Lamentablemente, su sueño le costó la vida al tratar de cruzar el Río Bravo. El cuerpo del salvadoreño fue hallado sin vida junto a su hija.

Durante dos meses, la pareja de migrantes se hospedó en un albergue en la ciudad de Tapachula. Según sus familiares, ellos habían solicitado refugio en México, país que les extendió una visa para mientras resolvían la petición.

Sin embargo, el trámite tardó demasiado y la pareja no quiso seguir esperando.

Rosa Ramirez, madre del joven, trató de convencer a su hijo de abandonar la idea de irse a los Estados Unidos, "por la dificultad de cruzar la frontera".

"Es muy triste, porque sucedió lo que todos ya saben. Estamos pidiéndole a Dios, porque es el único que nos puede dar esa fortaleza", dijo Rosa Ramírez al diario La Prensa Gráfica de El Salvador.

La madre cuenta que el migrante salvadoreño murió tratando de rescatar a su hija, antes de que ésta fuera arrastrada por la corriente del Río Bravo.

Óscar Martínez murió el domingo en la tarde en una zona cerda de Matamoros, Tamaulipas (noreste de México), casi a un kilómetro del puente nuevo internacional. Tamaulipas conecta con la ciudad de Brownsville, Texas.

Tania Ávalos salió con vida y fue rescatada. La joven contó a las autoridades locales que la corriente se llevó primero a Valeria y que Óscar salió a rescatarla, pero ambos fueron arrastrados por la corriente del Río Bravo y desaparecieron.

Fueron los gritos y la desesperación de Tania lo que alertó a los servicios de Protección Civil locales y militares presentes en la zona.

Tan solo el año pasado fallecieron 283 personas que intentaron cruzar la frontera norte de México para llegar a los Estados Unidos.

Otra tragedia similar que ocurrió este mes es la muerte de Christopher Franklin Nicholas Schultz, de 31 años. El hombre falleció ahogado tras saltar detrás de su hijo de 3 años, luego de que él cayera de un puente hasta el agua en Detroit Lakes, Minnesota.

Las autoridades dicen que el padre tuvo dificultades manteniendo al niño por encima del agua. Los testigos se lanzaron al agua para ayudar al niño a llegar a la orilla, pero el hombre no volvió a salir del agua.