Bea Johnson: Historia de una familia que ha vivido 11 años sin producir residuos
Bea y su familia han simplificado su vida al punto que su producción de desechos es prácticamente inexistente.
De cara al deterioro del planeta, una madre junto a su familia ha decidido convertirse en agente de cambio teniendo un estilo de vida eco-amigable.
Bea Johnson y su esposo quisieron darle un mejor futuro a sus hijos, por lo que no pudieron seguir dándole la espalda a la problemática ambiental que afecta a todo el planeta, y comenzaron a notar la diferencia cuando en un año solo produjeron un frasco de desperdicios.
POR UN MEJOR MAÑANA
La familia americana promedio genera más de dos toneladas de basura al año, pero este no es el caso de los Johnson, cuyos desperdicios caben perfectamente en un puño gracias a las técnicas que Bea y los suyos lograron ejecutar.
Mamá, papá y los dos hijos pusieron manos a la obra, hasta lograr el estilo de vida que la francesa de 45 años logró instaurar en su hogar bajo lo que ella llama las "5 R's" por sus siglas en inglés: Rehúsarse, Reducir, Reusar, Reciclar y Compostar.
Bajo esta premisa, los Johnson se rehúsan a implementar cosas que no necesitan, como las bolsas plásticas en mercados o los empaques. También reducen su consumo obteniendo solo lo necesario, reusando objetos de segunda mano, reciclando los desperdicios y compostando los desechos orgánicos.
Bea Johnson explicando cómo hizo para que esta fuera toda su basura de un año │Imagen tomada de: YouTube / BrightVibes
UNA MANERA DE VIVIR EN CONSECUENCIA CON EL PLANETA
Desde hace 11 años los Johnson han estado empleando esta filosofía que los ha dejado con 11 frascos, cada uno contiene la basura que han producido durante la década.
“Esto es un estilo de vida, no una llamada a la acción ecologista”, aclaró Bea, agregando que: “Lo que predico, realmente, no es el reciclaje. Es no tener que llegar a él”.
Lo que ha logrado esta madre francesa, residente en Estados Unidos, es verdaderamente impresionante, por lo que plasmó la experiencia en un libro llamado "Residuo cero en casa", publicado en 2013.
Publicado en 26 idiomas, el texto la convirtió en una gurú cuyo mensaje le ha dado la vuelta al mundo, gracias a sus increíble resultados, no solo en el cuidado ambiental, sino en su bienestar general.
UN CONTUNDENTE MENSAJE
"Es más efectivo decirle a la gente que puede ahorrar dinero, tiempo y mejorar su salud si evita generar residuos que exponer los abrumadores datos del ecologismo", puntualizó Bea, cuyos hijos de 17 y 19 años, prefieren vivir experiencias que recibir regalos físicos, gracias a la manera en la que han crecido.
“Siempre me pareció interesante que tengamos tan arraigada la necesidad de acumular objetos y traspasarlos a quienes nos suceden. A mí me encantaría, al morir, no dejar nada más que la ropa que lleve puesta”, concluyó esta admirable mujer que con su mensaje está haciendo combatiendo los estragos de la huella humana sobre la tierra.
Como ella, hay más personas haciendo lo que consideran correcto para conservar el hogar más grande que tenemos, uno de esos ciudadanos conscientes es Ryan DeVries, quien preocupado por la construcción de una represa que acabaría con la fauna de un río en especifico, escribó una carta al Departamento de Calidad del Ambiente.