La historia de Adriángela, la Ye-Yé valenciana con una voz perfecta
La voz educada de Adriángela llamó la atención del sello Iberofón en 1961, durante su participación en el Primer Certamen de la Canción de Madrid.
El pop español vivió un movimiento en los años 60 llamado "Chicas Ye-yé", una tendencia de artistas pop que rompían esquemas usando puestas en escenas arriesgas y producciones que proyectaba lo que se venía.
Una de las relevantes fue María José Guillén, mejor conocida como Adriángela, una egresada del Conservatorio de Valencia. Estudió piano y canto, lo cual demostró en el Primer Certamen de la Canción de Madrid en 1961.
Adriángela en acción │Imagen tomada de: YouTube / copilunio
UNA VOZ PRODIGIOSA
A raíz de su sorprendente interpretación en el concurso, el sello discográfico Iberofón quiso explotar su talento con un EP, luego de la producción, la valenciana concursó en otra competencia de canto, esta vez en Benidorm, donde no tuvo mayor relevancia, hasta que en 1965 firmó con Zafiro, sello que le patrocinó nueve discos.
Pero su salto a la fama pasó cuando se coronó ganadora del Festival de la Canción Española de Palma de Mallorca con el tema "Recordar", el cual hizo resaltar con su voz educada que incluso era capaz de versionar éxitos de las estrellas del momento, como Dionne Worwick, Sandie Shaw o Dusty Springfield.
Adriángela en cantando│Imagen tomada de: YouTube / copilunio
Un rasgo característico de su puesta en escena, eran los elaborados peinados que la destacaban aún más del resto de cantantes "Ye-yé"; esto aunado a su talento, arrasaba con los festivales veraniegos que fueron testigos de tal despliegue.
PREFIRIÓ DEDICARSE AL ARTE
En 1969 deja Zafiro y se unió a Sintonía, con quienes graba dos EP, luego en 1971 saltó a FIdias, donde produjo otro. Sin embargo, luego de años de carrera, la artista decidió retirarse de los medios y dedicarse a lo que más le gusta: hacer música.
Adriángela cantando con pasión│Imagen tomada de: YouTube / copilunio
Así que fue a Terremolinos a principio de los 70, donde abrió su propio piano-club donde llamado Andriángela. Desde entonces se dedicó a actuar en su local, donde logró realizarse como artistas, al igual que Roberto Carlos, quien tuvo una vida más que dramática.