Roca Rey: la joven estrella del toreo que habla con los muertos y cuya 'novia es el toro'

Este joven peruano ha logrado darle un nuevo aire al arte del toreo, con su estilo único y su encanto, donde mezcla con gran acierto la tradición y la vida en las redes sociales.

En sus cortos 22 años, Andrés Roca Rey se ha ganado un lugar en el mundo de las corridas de toros, donde desborda las plazas al impresionar al exigente público con sus novedosos y arriesgados pases, además de ser un chico del siglo XXI, aprovechando las nuevas tecnologías para dar a conocer su marca.

Actualmente está ausente de los ruedos por una importante lesión en sus cervicales, producto de un revolcón sufrido en mayo pasado, en San Isidro, donde el toro Carcelero lo embistió con certeza en su pierna. Recientemente se anunció su reaparición en Lima, el próximo 3 de noviembre.

SUS INICIOS

Nacido en Lima, en el seno de una familia con tradición taurina, manifestó su deseo de seguir los pasos de su hermano Fernando, su tío José Antonio y uno de sus abuelos, y se pasaba las horas entre películas de toros y toreando las sillas con alguna toalla.

"Fue con sólo cuatro años cuando empezó a decirnos que quería ser torero como El Juli", contó su padre en una oportunidad.

A los siete años se le dio como regalo de cumpleaños un becerro para su primer toreo, y a los doce tuvo su debut en una novillada sin caballo. A los 15, el torero sevillano José Antonio Campuzano lo llevó a España, donde inició su entrenamiento formal que lo llevó a donde está hoy en día, como el número uno.

LA NOVIA ES EL TORO

Se le pregunta con frecuencia el porqué de su pasión por el toreo, bien sabido que no es por el dinero, ya que proviene de una familia con poder económico, a lo que responde que lo hace por la pasión, por dejar su huella, por el amor a lo que hace.

"Pues se torea por varias cosas. Por el sentimiento, por afición, por dejar algo en esta profesión… Como yo empecé de muy niño no puedo decir tampoco que lo hiciera por dinero, aunque ahora pienso que puede ser otra de las razones por la que nos vestimos de luces" fueron sus palabras, según el portal digital Chic.

Igualmente se insiste en el tema de las novias, en especial cuando se le ve con alguna chica en las redes, más él repite que su novia es el toro, y que está abocado en exclusiva a su profesión, sea toreando, o bien entrenando. Es un hombre feliz frente a un toro.

HABLA CON LOS MUERTOS

Esta pasión por los toros pone en riesgo su vida en cada corrida, y bien lo sabe el limeño, quien ha perdido a cuatro amigos, toreros muy jóvenes, a lo largo de estos años.

Él habla de eso con mucha serenidad, manifestando ser de los que creen que las personas dejan su energía y él se fortalece con ella, por lo que se siente seguro pidiéndoles a ellos.

“Creo en la energía que deja en el mundo la gente que se va. Muchas veces le pido por algo a mi abuela, o a algún familiar o amigo que se ha muerto, y me siento fuerte. Se transmite la energía que han dejado”, dijo en entrevista a El País.

Por ahora, crecen las expectativas sobre su regreso, donde será la máxima atracción en la feria limeña del Cristo de los Milagros, en su país natal. Mientras tanto, disfrutamos conociendo a los mejores toreros españoles de las últimas décadas.