El día en que Anel y Sarita dejaron sus diferencias de lado y celebraron a José José

Ese cumpleaños fue muy importante para el fallecido cantante mexicano, pues también pudo pasar el día con sus hijos mayores, Marysol y José Joel Sosa.

Tras la muerte del cantante y compositor mexicano, José José, muchas han sido las anécdotas recordadas por los medios de comunicación sobre este apreciado artista.

Una de las más conmovedoras tal vez sea la celebración de su cumpleaños 54, en el año 2002, en el que su asistente personal para ese tiempo, Anathan Briss, logró juntar a dos de las mujeres de su vida y madres de sus hijos, Anel Noreña y Sara Salazar.

Nadie pensó que tal hazaña podría lograrse, a juzgar por las confrontaciones que han tenido estas mujeres desde que se conocieron, pero ese día dejaron los problemas a un lado para celebrarle al “Príncipe de la canción” ese día tan especial en el desaparecido restaurante ‘La Curva’.

Briss tuvo que conversar con Anel para que asistiera a la velada y explicarle la importancia de su presencia en el lugar, a pesar de que Sara estuviera allí.

“En aquella época estaban peleados Anel y José José, entonces ella no quería ir, pero le dije: ‘Vaya, aunque esté Sara, porque no quiero que el día que se nos vaya el señor, su conciencia esté intranquila’. Decidió ir y nos tomamos una foto juntos con el pastel. Lo festejamos en La Curva, un restaurante muy famoso que estaba en Palmas”, contó Briss.

Ese festejo fue muy importante para el agasajado. Y es que al Anel asistir también fueron con ella sus hijos Marysol y José Joel Sosa.

El “Príncipe de la canción”, no podía estar más feliz. Fue una velada perfecta, con decenas de invitados a quienes el cantante ofrecía toda su alegría y amabilidad.

Briss recordó cómo decidió pedirle a Noreña que asistiera: “La quiero mucho, entonces me respondió: ‘Tienes razón, tuve dos hijos con él, me convenciste y voy a ir’. Llegó y compartió en la mesa con Sarita la comida que ofrecimos, fue Marysol y Pepito también”.

El asistente personal recuerda con mucho cariño al fallecido intérprete, a quien describió como un hombre altruista. Recordó que en una gira que tuvo en Sudamérica el mexicano fue a Guayaquil, donde sin pensarlo dos veces ayudó a una señora que necesitaba una operación con urgencia, aunque al final ninguno terminó pagando nada por la intervención.

También contó que durante el tiempo que estuvieron juntos, José José siempre fue amable y no lo veía triste: “El señor se disfrazaba para salir de noche, se vestía como Pedro Navaja, con un gabardina y lentes oscuros, para evitar que lo reconocieran. Solo me señalaba la comida, pero no era por no querer convivir, sino para cenar a gusto”.

La que no se ha ganado la buena voluntad de los fans de José José es la hija menor del intérprete mexicano, Sarita Sosa, quien en el pasado cumpleaños de su papá, en febrero de este año, le negó al cantante y actor Cristian Castro la oportunidad de felicitarlo.

Castro muchas veces ha manifestado ser uno de los más grandes fans de José José, y contó en "De Primera Mano" lo que Sarita le hizo.