Chiste del día: Un maestro le formula a su alumno una pregunta de matemáticas

Los niños a menudo hacen los mejores chistes, sin que ellos lo sepan y a continuación te mostramos lo hilarante que los pequeñines pueden llegar a ser.

En este hilarante relato una maestra de matemáticas de segundo grado y un estudiante tienen un pequeño problema de comunicación en plena clase.

Durante una lección de suma, la maestra le preguntó a uno de sus alumnos más inteligentes: "¿Cuántos años tenía en su último cumpleaños?", pero lo que ella no sabía es que el niño la pondría a pensar.

LA GENIALIDAD TAMBIÉN VIENE EN FRASCO PEQUEÑO

Ante la mirada expectante de la docente, el estudiante muy diligentemente respondió que tenía siete años en su último cumpleaños.

“¿Cuántos años tendrás en tu próximo cumpleaños?”, preguntó la maestra, a lo que el chico respondió: "Nueve".

"¡Eso es imposible!", dijo confundida la mujer. Enseguida el niño le replicó con mucha seguridad: "No, no es imposible. Hoy tengo ocho años ". La respuesta dejó atónita a la docente ¡Parece que el estudiante es más inteligente que su maestro!

EL INTELECTO INFANTIL NUNCA DEJA DE SORPRENDER

Aquí hay un chiste extra para hacerte reír ... Para verificar si entendían la idea de llegar al cielo, una maestra estaba interrogando a los niños en su clase de escuela dominical.

"En el caso de que vendiera mi casa y mi vehículo, tuviera una importante venta de garaje y diera todo mi dinero en efectivo a la iglesia, ¿eso me llevaría al Cielo?" ella les preguntó. A lo que los niños respondieron: "¡NO!".

"Si limpiara la iglesia constantemente, cortara el patio y mantuviera todo limpio y ordenado, ¿eso me llevaría al Cielo?" Una vez más, la respuesta fue: "¡NO!" Ahora la maestra estaba sonriendo.

LOS NIÑOS SON SINÓNIMOS DE SONRISAS

Ella creía que los niños lo estaban entendiendo. Ella preguntó: "Bueno, si cuidara a los animales y ofreciera dulces a todos los niños, y amara a mi esposo, ¿eso me llevaría al Cielo?" Nuevamente, todos respondieron: "¡NO!".

La maestra llena de orgullo por su clase procedió: "Bueno ... entonces, ¿cómo puedo llegar al cielo?", a lo que un niño de cinco años contestó gritando: "¡Debes estar muerta!".

Regalar carcajadas es un ejercicio maravilloso para compartir y si quieres seguir disfrutando del arte de la comedia, haz clic aquí para morir de la risa con la respuesta que le da este padre a su hijo cuando el pequeño le pregunta por qué tiene condones en su billetera.