Los problemas que vivió Kiko Rivera: depresión, sobrepeso y presión por altas expectativas
Muchos pensarían que por ser hijo de la famosa tonadillera Isabel Pantoja, Kiko Rivera ha tenido una vida fácil. Sin embargo, el DJ ha atravesado por muchos problemas que lo han dejado marcado.
El cantante y colaborador de televisión, Kiko Rivera ha tenido una vida repleta de altibajos desde el momento de su nacimiento. Teniendo una madre famosa, Kiko Rivera siempre llamó la atención.
Con tan solo siente meses de nacido, el pequeño que ya estaba en el ojo público, se convirtió en huérfano de padre, y esta fue tan solo la primera tragedia que debió vivir.
Más adelante, Kiko empezó a explorar por sí mismo, lo que significaba estar en el mundo del espectáculo. Una vida llena de fama pero también de mucha frivolidad, en la que los medios no temen hablar sobre la vida privada de las personalidades, sin pensar en cuánto podría afectar.
Kiko debió enfrentar críticas por sus idas y vueltas en relaciones amorosas, y algunas personas que trataban de aprovecharse de su fama. Sin embargo, fue el momento de condena e ingreso en prisión de su madre, uno de los más duros golpes que recibió de la vida.
Para el hijo de Isabel Pantoja, el sufrimiento de ver a su madre tras las rejas no se compara ni con el infierno que atravesó cuando tenía adicción por las drogas.
Durante esa época Rivera tuvo una ola de fama como concursante de reality, y se convirtió en DJ, pero el buen momento le duró poco puesto a que se convirtió en blanco de críticas por su flojera y obesidad.
El sobrepeso de Kiko le estaba pasando factura, y padeció de diabetes y gota, lo que más adelante afectaría también su salud mental.
Rivera debió adelgazar para mejorar su salud física pero empezó a hacerlo tan rápido que le causó una depresión.
“Sentía que me quería morir (…) Tenía hambre y no podía comer”, contó en el pasado, señalando que también tenía problemas familiares.
Kiko explicó que se sentía muy presionado por la ansiedad que le que le generaba su estricta dieta, y por su profesión, en la que le exigían mucho más por ser hijo de Isabel Pantoja.
Sin embargo, tras ver un documental acerca del DJ canadiense, Avicii, Kiko se dio cuenta de que necesitaba un cambio en su vida, y fue allí donde empezó a trabajar junto a su pareja, Irene Rosales, para arreglar su vida.
La pareja empezó a salir en el año 2014, y su relación tampoco ha sido fácil pero han logrado ser felices a pesar de los rumores y los malos momentos. Su familia ha sido de suma importancia para él, y hoy en día parece estar más feliz que nunca.