Jacqueline Bracamontes: el duro golpe que sufrió al perder a uno de sus gemelos
La presentadora aún se quiebra cuando intenta compartir lo que fue la peor experiencia de su vida, cuando perdió a su pequeño hijo recién nacido.
A pesar de la fortaleza natural de las mujeres, si para algo no nos prepara la vida es para la pérdida de algún hijo. Se siente injusto, se siente antinatural, y sin embargo, la vida continúa, como bien sabe Jacky Bracamontes.
Han pasado siete años del día en que las emociones la rebasaron, al abrazar a su frágil bebita recién nacida mientras rezaba por Martín, el gemelo de la niña.
En el 2013, Jacqueline Bracamonte y su esposo Martín Fuentes estaban embarazados por primera vez y esperaban llenos de ilusión e incertidumbre a sus gemelos, un niño y una niña que llevarían sus nombres.
“Todo estaba normal, pero comencé a sentir contracciones muy fuertes y seguidas. Tuve que ir al hospital y ahí, luego de varios minutos y una revisión, el doctor me dice ‘tus bebés van a nacer hoy’. Sentí mucho miedo de que mis pequeños nacieran muy prematuros, apenas tenían 34 semanas”, contó Jacky en entrevista a El Universal.
Al nacer, Martín tenía un color azul en su piel y no era capaz de respirar. Después se supo que posiblemente tenía un par de días sin vida en el vientre de su madre. Los médicos no pudieron hacer nada para salvarlo.
“Lloré todos los días y todas las noches que estuve internada, al menos veinte, a todas horas, y todavía después. La muerte de un hijo es algo que nunca se supera, algo con lo que apenas se aprende a vivir. Es un dolor que no se olvida, sigue lastimando el alma mientras dura la conciencia”, se lee en las líneas del libro “La pasarela de mi vida”, escrito por Jacky Bracamontes.
Su esposo fue su roca, su apoyo, su consuelo y la fuerza que la sostuvo durante ese período. Entendió en un momento dado que debía dejar de preguntarse ¿Por qué pasó? e intentar saber ¿para qué pasó? Y con el paso de los años ha llegado a sentir que tiene alguna respuesta:
“Mi hijo vino al mundo para salvar a su hermana. Quizá si Jacky hubiera venido sola le habría pasado lo mismo y no habría podido vivir”, escribió Bracamonte en su autobiografía.
Después del nacimiento de Jacky, la pareja ha visto nacer a cuatro maravillosas y perfectas niñas más, y las dos últimas, son las gemelas Emilia y Paula que ya se han hecho muy populares en las redes por su tierno encanto.