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youtube.com/El Oscuro Rincón del Terror
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La historia de Silvia Aguilar, exitosa actriz cuyo talento dramático fue desaprovechado

Vanessa Guzmán
08 dic 2019
13:00

Aunque se preparó histriónicamente con destacados actores, parece que no fue suficiente para obtener un gran papel.

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Silvia Aguilar fue una reconocida actriz mexicana, cuyo talento dramático se desperdició, pues nunca logró ser tomada en cuenta para grandes interpretaciones.

Por más empeño que puso, el reconocimiento que tuvo del público, fue como actriz de destape, ya que la muchas de sus actuaciones fueron en películas subidas de tono, en las que le tocaba desnudarse o mostrar bastante.

Silvia Aguilar en "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

Silvia Aguilar en "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

EL DESEO DE TODA JOVEN

Como toda jovencita, Silvia deseaba ser modelo, actriz o cantante, pero cada vez que se le presentaba una oportunidad para derrochar su talento, por novatadas, se encontró en situaciones que la expusieron como mujer y que, incluso, no eran lo que esperaba.

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La joven que con tan solo 16 años fue elegida como ‘Chica 74’, concurso promovido por La Voz de Alicante para jóvenes valores, le ayudó a intervenir en un programa radiofónico, pero ella quería más.

Fue entonces cuando se mudó a Barcelona y estudió modelaje. Tras un spot publicitario comenzaron a identificarla como "la chica Bankinter". Quien dirigió el anuncio fue Jaime de Armiñán, un importante realizador cinematográfico, que en épocas en las que no dirige alguna película, se gana la vida con la publicidad.

Silvia Aguilar en "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

Silvia Aguilar en "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

Gracias a Jaime tuvo la oportunidad de aparecer en uno de sus filmes y también, recordando la chica del spot bancario, Chicho Ibáñez Serrador la contactó para cubrir con urgencia la ausencia de Victoria Abril, azafata de Un, dos, tres.

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Silvia se convirtió en su suplente por tres programas, y luego le comenzaron a llegar ofertas para hacer películas, pero el agente que la representaba tenía permiso de sus padres para manejar su carrera, por ser menor de edad, y firmó un contrato para un papel en el que tuvo que desnudarse.

Resulta que ella no leyó el guion y no podía arrepentirse porque ya estaba firmada su participación con documentos legales de por medio.

Desde entonces, Silvia Aguilar se volvió una actriz habitual del llamado despelote en el cine, que estuvo bien de moda en los años 70.

Escenas de la película "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

Escenas de la película "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

SE LAMENTABA

Aunque había recibido lecciones de arte dramático con profesores de la talla de William Leyton y Dina Roth, lamentaba no poder tener un mejor papel que el de actriz de películas con desnudos.

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Pero algunas cosas cambiaron cuando fue elegida para varias películas de terror y suspenso. Aunque no era lo que ella soñaba, le brindó una nueva oportunidad en el séptimo arte, más allá de enseñar sus carnes.

Gracias a las películas de terror, su nombre se hizo más conocido, a pesar de que ya había aparecido en portadas en Interviú, Party, Garbo y Fotogramas, donde ya tenía asumidas las características de las fotografías, mostrando sus encantos íntimos, más o menos explícitos.

Pero por fortuna para ella, haber tenido la oportunidad de actuar en las películas de terror, le permitió conocer otra faceta del cine, sin embargo, se sintió disminuida casi hasta su retiro.

Escenas de la película "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

Escenas de la película "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

MUCHOS INTENTOS

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Silvia intentó destacarse y ser una gran actriz, muchas veces. Incluso con rodajes en Francia, Italia y México, pero su talento no estaba siendo explotado por los expertos del mundo del espectáculo.

Participó en coproducciones cinematográficas suizo-francesas, probando otras áreas. Luego montó una compañía amateur de teatro, que dirigió, poniendo en escena obras de García Lorca y de autores contemporáneos.

Pero en su lucha por hacer de su nombre uno que recordara todo el mundo, desistió de su lucha y decidió decir adiós a su carrera artística.

Estudió Ciencias Económicas, trabajó de secretaria en una entidad bancaria suiza unos años a partir de 1982.

Volvió a España y se casó en 1992 con Jacinto Rodríguez, director de una sala de arte. Tiempo más tarde eligió Barcelona para emprender un negocio inmobiliario.

Silvia Aguilar en "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

Silvia Aguilar en "El retorno del hombre lobo" (1980). | Foto: YouTube/ El Oscuro Rincón del Terror

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FELIZ SIN PENSAR EN EL PASADO

La actriz que empezó su carrera siendo una adolescente, llegó a manifestar, según publicó Libertad Digital, que era más feliz sin pensar en el pasado.

Y aunque tuvo la suerte de trabajar con buenos directores y actores como José Luis López Vázquez, Alfredo Landa y actrices internacionales de la talla de Alida Valli o la "sexy" Capucine; Silvia Aguilar fue una de esas actrices todoterreno que cuando llegó al cine se encontró que muchos de los papeles que le encargaban no eran del tipo que hubiera deseado.

Después de dejas las luces y las cámaras, su vida estuvo enfocada en sus tres hijos y su nueva faceta empresarial.

Por otra parte, esta actriz española sí logró convertirse en una de las más destacadas figuras del país, pero su vida estuvo afectada por 10 factores neurálgicos que la cambiaron por completo. Conoce más detalles sobre Rosa María Sardá, aquí.

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