Carolina Monje: conoce a la pareja de Álex Lequio que lo acompaña durante su tratamiento
La joven ya lleva dos años de relación con el hijo de Ana García Obregón y ha demostrado que sin importar qué tan difíciles sean sus días, ella estará allí para apoyarlo.
Han pasado dos años desde que Álex Lequio empezó su batalla contra el cáncer, y aunque ciertamente la lucha ha sido sumamente difícil, no le ha faltado amor ni apoyo en todo el proceso.
No solo sus padres han estado a su lado durante todo este tiempo, dándole fuerza y acompañándolo en cada tratamiento, sino que además tiene a su pareja, Carolina Monje.
La joven de 27 años de edad, llegó en lo que probablemente ha sido la etapa más difícil en la vida de Álex, pero desde entonces, ella ha demostrado que está dispuesta a seguir junto a él sin importar lo complicado que sea.
Además de ser una novia dedicada, Carolina es una mujer inteligente, pues habla cinco idiomas y es licenciada en Dirección y Gestión de Empresas, titulada por la universidad de Derby, en Inglaterra.
La pareja de Álex también posee un MBA en Administración y Gestión Hotelera, conocimientos que aplica en su trabajo como directora general del hotel cinco estrellas, La Torre del Canónigo de Ibiza.
Como si todo esto fuese poco, Carolina es una mujer emprendedora y altruista, pues tiene una firma de ropa y el 3% de las ventas que se realizan a través de la página web, a una organización sin fines de lucro.
Monje es hija de Virgina Vicario, una de las doctoras especializada en medicina estética más cotizadas de la ciudad condal, y de Pedro Monje, un empresario del sector de construcción.
No cabe duda de que Álex tiene a una gran mujer a su lado, que es capaz de llegarse hasta el lugar donde su novio esté para demostrarle su amor.
De hecho, mientras el hijo de Ana García Obregón permanece ingresado en una clínica de Barcelona por su tratamiento contra el cáncer, la joven ha tratado de buscar la forma de ir a visitarlo habitualmente.
Aunque es imposible saber si este amor perdurará con el tiempo, ambos están tan unidos pese a las dificultades, que resulta complicado pensar que podría ser diferente.