Niña con discapacidad se vuelve famosa cuando su video jugando al baloncesto con su hermano se viraliza
El video de una niña jugando al baloncesto con su hermano se hizo viral. Las tiernas imágenes recorrieron el mundo entero.
En él, Tomas MacCurtain, de 8 años, le acerca el aro a su hermana en silla de ruedas para que pueda anotar un tanto. 8 millones de personas ya vieron las imágenes de los hermanos Abby y Tomas jugando al baloncesto.
"¡Puedes hacerlo! ¡Abby, puedes hacerlo!" alienta Tomas a su hermana, mientras le acerca el aro para que anote.
Esta familia de Plymouth, Massachussets se hizo viral con este video de la pequeña Abby jugando al baloncesto con su hermano. Para esta niña, estar en silla de ruedas no es un impedimento para participar activamente en el mundo del deporte.
Junto con su familia, Abby participa en competencias de triatlón desde los cinco años, y en maratones con su madre. De hecho, tiene planeado correr la Maratón Virtual de Boston de este otoño.
Para la competencia de nado, su padre, que además de un amante del deporte es bombero, la lleva en un kayak inflable. También lo acompaña en la de ciclismo, asegurada con un arnés en una bicicleta de más de 2 metros de largo.
Usa también una silla de carreras, para la última parte del triatlón. Y disfruta mucho de estas actividades.
A los 10 meses de edad, Abby fue diagnosticada con síndrome de Leigh, una enfermedad neurodegenerativa que afecta el sistema nervioso central y cuyo pronóstico es muy poco auspicioso. De hecho, por entonces los médicos dijeron que no viviría más allá de los 2 años.
"Es una enfermedad neuromuscular. Su cuerpo no puede producir energía suficiente", explica su padre, Greg MacCurtain.
Abby es una niña feliz, que sonríe mucho y adora compartir tiempo y actividades con su familia. Los MacCurtain saben que no la tendrán por mucho tiempo entre ellos, y tratan de aprovechar al máximo cada día que se vive como un regalo.
"Un día todo lo que tendremos son los recuerdos, desafortunadamente", comenta Greg. "Cuando la diagnosticaron por primera vez dijeron que viviría dos años, y el invierno pasado cumplió 9 años. Está superando todas las expectativas."
A través de las redes sociales, esta familia comparte su experiencia inspiradora. Y promueve la inclusión con el día a día de estos dos hermanos y de sus padres, que comparten un cariño inigualable.
Historias como esta nos muestran que se puede tener un mundo mejor, en el que la inclusión hace del día a día de personas con discapacidad una experiencia más feliz y da la oportunidad para sorprender a todos. Así es el caso de Hunter, un joven de 19 años con discapacidad que consiguió la hazaña de caminar frente a sus amigos para recibir su diploma.