Miguel Rellán tras superar el coronavirus: "Estaba convencido de que no me iba a morir"

El actor Miguel Rellán ha superado el coronavirus, y pese a las dificultades que atravesó durante más de veinte días, tenía la certeza de que de esa saldría victorioso.

En entrevista con el medio Aisge, Rellán habló de su tiempo en el hospital, en donde terminó gracias al COVID-19 que desde el año pasado azota al mundo entero.

Recordemos que desde hace varios meses, el coronavirus rápidamente se ha extendido por todo el planeta, dejando miles de víctimas a su paso. A nivel mundial, más de 13 millones de personas se han contagiado, de las cuales alrededor 555 mil han muerto.

Como informa el Centro de Ciencia e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, solo en España se han presentado más de 266 mil casos y 28 mil muertes, país que en su momento fue uno de los más golpeados.

Nadie se salva. Tanto ‘mortales’ como personas famosas se han contagiado, y muchos incluso han perdido la vida. En el caso de Rellán, tuvo la bendición de salir victorioso del hospital.

Si bien fueron momentos duros en los que el malestar por el virus era incomparable, el artista de 76 años sabía que no pasaría al otro mundo, mostrándose muy optimista.

"No podía levantar siquiera el brazo, era como si me hubieran dado una paliza, aunque estaba convencido de que no me iba a morir", recordó en entrevista.

Lo cierto es que Rellán no recuerda mucho sobre su estadía en el hospital. Su memoria se pone “borrosa” al intentar recordar qué pasó después de que se acercó a urgencias sintiéndose muy mal.

Estuvo hospitalizado durante veinte días, en los que nunca paró de recibir apoyo de sus amigos y seres queridos, quienes le escribían por mensaje en todo momento. Sus enfermeras incluso le anotaron en un papel “Ánimo, Miguel” y lo pegaron al pie de la cama para mantenerle motivado.

Pese a todo, opina que el COVID-19 y sus efectos no cambiarán el mundo ni volverá buenas a las personas: "Seguirá habiendo gente estupenda y gente que no", aseguró, añadiendo que no pasa por alto lo duro que ha sido la enfermedad para quienes han perdido a seres queridos sin siquiera poder despedirse.

Miguel Rellán no puede esperar para volver a lo suyo, en especial porque tuvo que parar sus proyectos y trabajos de teatro mientras estuvo internado.

Ahora que está en casa, intenta mantenerse saludable de cuerpo y mente. Aprende diferentes poemas cada día mientras camina 6 o 7 kilómetros por las mañanas.