Verónica Castro comparte un mensaje por el fallecimiento de Manuel "el loco" Valdés
El fallecido humorista y la actriz empezaron a estar juntos en la década de los 70, y aunque la pareja no terminó muy bien, se despidió de él de una forma sumamente cariñosa a través de las redes sociales.
El pasado 28 de agosto se dio a conocer la lamentable noticia de que el famoso actor, humorista y productor, Manuel “el loco” Valdés, falleció a la edad de 89 años, luego de haber batallado con un cáncer de piel.
El fallecimiento causó un fuerte dolor entre sus seres más allegados, incluyendo a su hijo, Cristian Castro, quien le dedicó un emotivo mensaje de despedida a través de las redes sociales.
Sin embargo, lo que capaz el mundo no esperaba es que Verónica Castro también ocupara unos minutos de su tiempo para despedirse con una oración del hombre que le dio a su hijo:
“Gracias Señor, por este nuevo día. Hoy que la iglesia recuerda a San Agustín reconocemos con su frase que: ‘Nos hiciste Señor, para ti, y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en ti’. Ayúdanos a vivir de acuerdo a tu voluntad para que un día tengamos en ti, la paz eterna”.
El mensaje iba acompañado de un emoticón de cruz y el deseo de que “Manu”, como lo llamó, descanse en paz.
Cabe recordar que ellos vivieron como pareja una historia de amor tormentosa, que empezó a principio de la década de los 70, unos años después de que se conocieran en el programa “Operación Ja Ja”.
Se llevaban nada más y nada menos que 22 años de edad, pero este no fue impedimento para que disfrutaran de su amor.
Verónica quedó embarazada en el año 1974, pero fue entonces que descubrió que Manuel estaba casado, lo que hizo que la actriz pusiera fin a su relación y se alejara de él lo más posible.
De hecho, Cristian Castro no conoció a su padre sino hasta que tuvo nueve años de edad, cuando se encontraron por casualidad en un hotel en Acapulco y Verónica decidió contarle la verdad.
Ese difícil episodio será algo que Verónica nunca podrá olvidar, pero a pesar de eso, decidió despedirlo con la mayor humildad y cariño.