Donald y Melania Trump cada vez más alejados: no se ven mucho, ni cenan juntos

Varias fuentes han coincidido en que el presidente y la primera dama no comparten dormitorio desde hace varios años.

El pasado viernes 2 de octubre, Donald Trump anunció a través de su cuenta oficial de Twitter que él y Melania dieron positivo por la nueva enfermedad del coronavirus.

Ese mismo día, el presidente de los Estados Unidos fue ingresado en el hospital militar Walter Reed para asegurarse de que todo fuera avanzando bien, según lo indicó él mismo en otro tuit.

“JUNTOS” EN CUARENTENA

Sin embargo, apenas tres días después, el 5 de octubre, regresó a la Casa Blanca tras recibir el alta hospitalaria, a pesar de que todavía está infectado por la enfermedad.

Ahora, él y su esposa continuarán la cuarentena y el proceso de recuperación en la Casa Blanca. “¡Saldremos de esta juntos!”, dijo Donald en el mensaje donde reveló que contrajeron COVID-19.

Ciertamente se encuentran en la misma casa, pero cada uno por su lado, pues Melania ha pasado los días de confinamiento en su ala de la residencia presidencial.

Tras ganar las elecciones en noviembre de 2016, Donald se juramentó en el cargo en enero de 2017. Desde entonces se instaló en la Casa Blanca, aunque su esposa permaneció durante cinco meses en la Torre Trump junto a su hijo en común, Barron.

Señalaron que se debía a que el joven, que en aquel entonces tenía 10 años, debía terminar el año escolar sin interrupciones.

CONTRATO PRENUPCIAL

Sin embargo, Mary Jordan afirmó en su libro ‘The art of her deal: The untold story of Melania Trump’ (El arte de su acuerdo: la historia no contada de Melania Trump), que la primera dama no quería mudarse a Washington hasta renegociar su contrato prenupcial.

La periodista de The Washington Post indicó en su texto que la esposa del presidente quiso hacer esto por Barron pues, al parecer, el menor de los hijos de Donald no tenía las mismas garantías que sus hermanos mayores sobre la herencia de su padre.

NO DUERMEN JUNTOS

Según reseñó Vanity Fair, Stephanie Winston Wolkoff, examiga de la primera dama, reveló en sus memorias que la pareja presidencial no duerme junta desde años atrás, señalando que la conexión entre ellos era fría y funcional.

Business Insider indicó que un libro escrito por la corresponsal de CNN, Kate Bennett, revela que la primera dama no solo tiene su propia habitación, sino que ocupa un piso completamente separado del que habita su esposo en la Casa Blanca.

En su texto, la reportera indicó que Donald duerme en el dormitorio principal en el segundo nivel de la residencia presidencial, mientras que Melania se queda en el tercer piso, en un espacio de dos habitaciones.

En 2005, Larry King entrevistó a la pareja en su programa, y Donald aseguró que, tras un largo día de trabajo no quería tener que llegar a su casa a “trabajar en una relación".

Lo cierto es que, casi todos los cronistas concuerdan en que la primera dama y el presidente de los Estados Unidos no comparten casi tiempo juntos, a menos que la agenda oficial lo requiera.

Ambos tienen rutinas diarias diferentes y, sus días de cuarentena los pasarán juntos, como lo harían los vecinos en un conjunto residencial.