Cómo dejar de pelear en una relación: los consejos de una psicóloga

Hasta las parejas más unidas discuten de vez en cuando. Sin embargo, las peleas constantes puede conllevar a una relación problemática.

Cuando se trata de relaciones, el conflicto es inevitable. Pero las discusiones no tiene por qué ser emocionalmente angustiantes. Ambas partes pueden estar en desacuerdo, sin dejar a un lado la empatía y el espeto mutuo.

Evitar que una pelea se intensifique puede ayudarte a ti y a tu pareja a resolver las cosas de una manera más tranquila y productiva. Según la psicóloga clínica, Lisa Firestone, la clave está en la compasión.

A continuación, te mostramos sus consejos para dejar de pelear en tu relación.

NO REACCIONES A LA DEFENSIVA

Al momento de una discusión, es natural ponerse a la defensiva inmediatamente. Pero según los expertos en relaciones de pareja, lo ideal es evaluar objetivamente la situación antes de reaccionar. Si hiciste o dijiste algo hiriente, lo mejor es pedir una disculpa.

ENFÓCATE EN EL PRESENTE

Nuestras parejas nos hacen evocar fuertes emociones de nuestro pasado, lo que conlleva a que las proyectemos en el otro. Por dicha razón, un pequeño comentario puede ser percibido como una crítica malintencionada.

Aunque la reacción común es responder defensivamente, esto solo añade leña al fuego. Para llevar una relación sin conflictos, procura relacionarte con tu pareja desde el presente.

TOMA DISTANCIA PARA CALMARTE

Durante una pelea, es común que las emociones sean un poco irracionales, lo que hace que contestemos de manera impulsiva. Antes de responder algo que pueda lastimar al otro, aléjate unos minutos y respira.

Date un tiempo para enfriar tu mente y calmar tus ánimos. Al abordar el conflicto con una perspectiva renovada, evitarás que la discusión se prolongue.

COMUNICACIÓN HONESTA

En una confrontación, la reacción instintiva suele ser defendernos cuando nos sentimos atacados. En vez de reaccionar a la defensiva, invítalo a tener una comunicación abierta y sincera.

Esto no quiere decir que tengan que estar siempre de acuerdo. Sin embargo, una actitud receptiva invita a compartir un nivel de vulnerabilidad que permite la conciliación.

CREA LÍMITES EN UNA DISCUSIÓN

En cada relación debe haber ciertos límites para una pelea. Ambos pueden discutir de forma calmada, con un tono respetuoso. Aun cuando la discusión se acalora, las palabrotas y los insultos no se justifican.

Pónganse de acuerdo en evitar comportamientos destructivos, ya que estos solo desvían la atención del problema que necesitan solucionar.

VISIÓN POSITIVA DEL OTRO

Es común que, en medio de un desacuerdo, devaluemos al otro en nuestra mente. El cerebro humano está diseñado para buscar el peligro, por lo tanto, estará más alerta que nunca ante cualquier comportamiento percibido como "negativo".

No te dejes llevar por esa visión negativa de tu pareja que te dice "pero él me dijo esto" o "él hizo aquello". A su vez, cambia tu enfoque de lo que tu cónyuge hace mal a lo que hace bien. Recuerda que todos tenemos nuestros aciertos y errores.

TERAPIA DE PAREJA

Si ya lo has intentado todo y notas que las peleas siguen siendo frecuentes, considera consultar con un profesional. Algunos problemas maritales son difíciles de solucionar por tu cuenta. En estos casos, la terapia de pareja es una buena opción.

Un terapeuta posee las técnicas necesarias para identificar problemas que posiblemente estés pasando por alto. Además, ofrece un ambiente seguro donde ambas partes pueden expresar sus pensamientos y emociones.

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