Muñecos de nieve de pesadilla y pollos gigantes: 9 extrañas tarjetas navideñas victorianas
Para la mayoría de las personas, la Navidad representa alegría y felicidad, es por ello que cada individuo se esmera en hacer una decoración bonita en su hogar y enviar tarjetas navideñas con emotivos mensajes.
Sin embargo, en la época victoriana, las tarjetas que se obsequiaban eran tan espeluznantes que hoy en día es difícil entender cómo se consideraban apropiadas para las fiestas decembrinas.
Las imágenes que acompañan a los mensajes de Feliz Navidad en estas postales eran bastante peculiares.
El historiador Greg Jenner señaló que en un principio estas tarjetas comenzaron a ser fabricadas para festejar San Valentín.
Y como era muy costoso comprarlas y enviarlas, solo se reservaban para ocasiones especiales, como la época decembrina.
En la temporada navideña de 1843, Henry Cole, director y fundador del Museo V&A, tuvo la idea de producir tarjetas ilustradas para agilizar el proceso.
Luego de encargar el diseño, se imprimieron mil tarjetas y se colocaron a la venta, pero como su precio era elevado no tuvieron tanto éxito. A pesar de ello, la experiencia sirvió para sentar las bases de futuras tarjetas.
Por otra parte, entre 1850 y 1860, hubo un aumento en la popularidad de las tarjetas de Navidad. Esto se debió a la llegada del método Baxter, una técnica de impresión comercial en color inventada por el artista inglés George Baxter.
El método Baxter permitió una producción en masa más barata de las postales y por lo tanto, las volvió más accesibles a los bolsillos de los ciudadanos.
Con el tiempo, los diseños de las tarjetas comenzaron a tener un cambio interesante en sus temas, a medida que se volvieron más populares.
Los victorianos tenían una idea diferente de lo que era la Navidad, que se caracterizaba por no ser particularmente cristiana. Era una época de buen humor.
Los inesperados temas de las imágenes, junto con los alegres mensajes navideños, sacaron cada elemento de contexto e hicieron que las tarjetas fuesen bastante divertidas y originales para alguien que las ve en la actualidad.
Sin embargo, si miramos más allá de la rareza de las tarjetas, obtenemos una visión de la cultura y los valores de la época.