La obligaron a dar a su hijo en adopción: 66 años después lo encuentra al otro lado del mundo
Cuando comenzó a rastrear a su hijo encontró a su nieta. Ella tampoco había conocido a su padre y ambas continuaron la búsqueda juntas.
Una mujer de Yorkshire, Inglaterra, fue obligada por sus padres a dar en adopción a su bebé recién nacido cuando dio a luz a los 20 años. Issy Carr, ahora de 86 años, tuvo a su bebé el 13 de junio de 1955. Lo llamó George.
A lo largo de las décadas no dejó de pensar en su hijo. Sin embargo, después de 66 años logró encontrarlo. AmoMama te trae su historia.
Bebé recién nacido en un retén de neonatos. | Foto: Shutterstock
COMENZARON A RASTREARLO
El día de Navidad de 2018 alguien le sugirió a Issy el rastreo de ascendencia. Fue así como comenzó su búsqueda. Su muestra de ADN coincidió con la de una mujer en Perth, Australia, llamada Kym, que estaba buscando a su padre.
Lee más: Fue adoptada y cuando buscó a sus padres biológicos, descubrió que es una princesa africana
Posteriormente, más pruebas revelaron que Kym era su nieta. Esto reveló su conexión con su “George”. Luego ambas lanzaron una búsqueda en las redes sociales con la ayuda de Angela Bowskill, sobrina de Issy.
Se las arreglaron para encontrar una dirección. El pasado mes de mayo, Kym se presentó en el lugar y llamó a la puerta. Un hombre abrió y ella le confesó que era su hija. Unos días después, Issy vio a su hijo por primera vez en 66 años.
Lo hizo a través de una llamada de Zoom junto a su nieta. Los tres han pasado los últimos meses conversando y conociéndose. Ahora están esperando que disminuyan las restricciones para verse en persona.
La familia adoptiva de “George” lo llamó Keith. Él se crio a solo 16 kilómetros de Issy y cuando tenía 15 años se mudó a Australia con su familia.
LO AMÓ APENAS NACIÓ
Al reflexionar sobre el pasado, la madre dijo que amó a su hijo apenas nació, pero una enfermera le dijo que no debía verlo ni abrazarlo. No tardaron en llevárselo y nunca más lo volvió a ver.
“Mi madre me dijo que pronto me olvidaría de él, pero nunca lo hice y traté muchas veces de averiguar dónde había ido, pero fracasé. Nunca perdoné a mis padres, cualquiera que fuera su razón”, dijo Issy.
Después de la terrible experiencia de renunciar a él, trabajó muchas horas en la granja de sus padres. Luego conoció a un hombre llamado John Makinson Carr, con quien contrajo matrimonio en 1962.
Aunque la pareja no tuvo hijos propios, su matrimonio fue feliz. Él falleció en 1991. Esa fue la segunda trágica pérdida de la vida de Issy. Entonces, sus pensamientos volvieron a centrarse en su hijo perdido.
Él había conocido a una mujer y luego se había separado. “La coincidencia de ADN fue con su hija, Kym, a quien nunca había conocido”, contó.
Issy dijo que nunca superará el trauma de verse obligada a entregar a su hijo. También admitió que en ese momento no pudo desafiar la decisión de sus padres.
“Fue algo muy cruel, pero no había nada que pudiera hacer. Eso me convirtió en una persona fuerte”, señaló.
Durante mucho tiempo faltó una gran parte de su vida, pero finalmente pudo encontrar lo que tanto anhelaba. Ahora podrá compartir con su hijo y con su nieta para recuperar parte del tiempo perdido.
Puedes dejar tu mensaje en la sección de comentarios y suscribirte a AmoMama para conocer más noticias de tu interés.