Enfermera rompe la ley para hacerle un aviso al esposo de su paciente embarazada - Historia del día
El día de hoy te traemos la historia de una enfermera que se metió en problemas por violar la confidencialidad de un paciente y revelar el engaño en el seno de una familia.
La profesión médica es más que una carrera, una vocación para toda la vida. Los médicos y enfermeras no solo tienen que saber mucho de la salud, sino también hacer juramentos y respetar la confidencialidad del paciente.
La historia que te traemos el día de hoy es sobre una enfermera que decidió violar la confidencialidad de una paciente embarazada.
Ultrasonido de bebé en el vientre. | Foto: Pexels
Normalmente, el personal médico de un hospital está obligado legalmente a guardar los secretos de sus pacientes. Toda información médica es privilegiada, y no puede ser compartida con nadie sin el permiso del paciente.
Sin embargo, una enfermera llamada Sara descubrió que una mujer embarazada escondía un gran secreto de su marido. El hombre, Roger, no era el padre biológico de la criatura en el vientre de su mujer.
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La enfermera en un principio calló la verdad, esperando que la mujer, Lucía, confesara la verdad a Roger por su cuenta. Pero pasaron los meses y Roger seguía sin saber lo que sucedía.
Fue en ese momento cuando Sara decidió romper su silencio y decirle la verdad a Roger. Le parecía injusto que Roger terminase criando a un hijo que no era suyo sin siquiera saberlo.
Doctora cuenta secreto a doctor. | Foto: Shutterstock
Cuando Roger supo la verdad, puso el grito en el cielo y le pidió el divorcio a Lucía. La mujer, indignada, exigió saber cómo se había enterado de la situación, así que el hospital comenzó una investigación.
Descubrieron rápidamente en los registros electrónicos del recinto médico que la única que había tenido acceso a esa información era Sara. Al día siguiente, la enfermera había perdido su trabajo por las quejas de Lucía.
Además, Lucía quiere tomar acciones legales contra Sara para que pierda su licencia de enfermera. De ser hallada culpable, la enfermera tendría que pagar una cuantiosa multa y podría incluso ir a la cárcel.
Y tú, ¿qué piensas? ¿Fue correcto lo que hizo Sara al contar la verdad? ¿O fue demasiado lejos al decirle a Roger que él no era el padre? ¡Cuéntanos tu opinión en los comentarios!
Esta es una obra de ficción. Nombres, personajes, negocios, eventos e incidentes son productos de la imaginación del autor. Cualquier parecido con personas reales, vivas o fallecidas, o hechos reales es pura coincidencia.
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