Harry aún se arrepiente de su última conversación con Diana y se desesperó por escapar del dolor tras su muerte

Desde que renunció a su título como miembro principal de la realeza, Harry ha hablado sobre sus experiencias, decisiones y razones de la infancia. El año pasado, reveló detalles de su última conversación telefónica con su madre antes de su muerte y cómo hizo frente a la partida de Diana.

Tras la muerte prematura de la princesa Diana, muchos fanáticos reales quedaron devastados. Pero su ausencia fue aún más trágica para sus dos hijos pequeños, William y Harry.

Más de dos décadas después de su fallecimiento, su hijo menor hizo revelaciones nunca antes escuchadas sobre su infancia en una entrevista con Oprah Winfrey en la serie documental "The Me You Can't See".

Tuvo mucha confusión

Harry, cuya infancia se vio sacudida por la separación de sus padres y la muerte de su madre, vio sus años de juventud como "desconcertantes" y siempre anheló que "ser normal".

Mientras hablaba con Dax Shepard en el podcast "Armchair Expert", el príncipe relacionó su infancia con un alto nivel de confusión. Para él, fue "una mezcla entre 'The Truman Show' y estar en un zoológico".

Harry confirmó haber presenciado episodios en los que su madre conducía el automóvil a toda prisa con él y su hermano adentro mientras intentaba esconderse de los paparazzi. En sus palabras:

"Siempre se veía imposibilitda de conducir debido a las lágrimas. No había protección".

El duque de Sussex admitió que reconoció la necesidad de ayuda de su madre, pero no pudo ayudarla porque era joven. Lamentablemente, soportó ese frenesí de paparazzi todos los días hasta su muerte.

Harry agregó que estaba furioso con su muerte prematura y la falta de justicia. Le sigue costando hablar del tema.

"No quiero pensar en eso porque traerá a colación el hecho de que no puedo traerla de vuelta", manifestó.

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A pesar de su convicción, Harry todavía siente culpa en su corazón. Cada vez que reflexiona sobre el último día que hablaron, unas horas antes de su muerte, se reprocha por haber terminado la llamada apresuradamente.

La última vez del príncipe Harry con Diana

A principios de agosto, unas semanas antes de la muerte de Diana, sus hijos estaban de vacaciones en las Tierras Altas de Escocia, jugando y divirtiéndose con sus primos.

A pesar de estar lejos de ellos en ese momento, Diana tenía el deber de controlar a sus hijos a través de llamadas telefónicas constantemente. Harry confesó que hablar con su madre por teléfono no era su pasatiempo favorito cuando era niño.

Pero eso no les impidió hablar. Sin embargo, ambos hermanos estaban tan absortos en sus actividades que siempre se apresuraban a colgarle a su madre después de lo que parecía una llamada telefónica prolongada.

El día de su muerte, Harry fue llamado para hablar con su madre después de William. Como siempre, corrió al teléfono y estaba impaciente por terminar la conversación.

Aunque el príncipe mencionó que no podía recordar los detalles de su conversación, una cosa ha permanecido clara durante muchos años, su pesar por cortar demasiado pronto. De acuerdo con él:

"Realmente no puedo recordar lo que dije, pero todo lo que recuerdo es por lo que me lamentaré toda mi vida y es cuán corta fue esa llamada. Si hubiera sabido que esa era la última vez que iba a hablar con mi mamá las cosas que le diría, las cosas que le habría dicho".

Sin pelos en la lengua, Harry expresó su remordimiento, mezclado con tristeza. Dijo que habría sido diferente si hubiera sabido que esa era su última conversación.

Este sentimiento persistió desde esa noche hasta su edad adulta. El arrepentimiento contribuyó de alguna manera a algunas de sus decisiones mientras buscaba escapar de la miseria que sentía.

Cómo Harry adormeció su dolor

Después de la muerte de Diana en 1997, lo que comenzó como tristeza se transformó en ira para Harry. Estaba lleno de dolor y necesitaba adormecerlo para continuar con su vida.

La muerte de Diana nubló sus decisiones y el príncipe más joven recurrió al alcohol y otras sustancias para hacer frente a sus sentimientos. En una reveladora entrevista, afirmó: "Estaba dispuesto a beber, estaba dispuesto a tomar drogas, estaba dispuesto a intentar hacer las cosas que me hacían sentir menos como me sentía".

Con honestidad encomiable, Harry confesó que no bebía todos los días de la semana, pero que podía tragar incontables botellas durante el fin de semana. A pesar de que se le había convertido en un ritual, no se daba cuenta que estaba tratando de enmascarar su dolor.

Aunque se sentía vacío y necesitaba algo que lo ayudara a sobrellevar su dolor, rara vez mostraba sus emociones. El duque reveló que solo ha llorado dos veces para mostrar su infelicidad.

La primera vez que derramó una lágrima fue en septiembre de 1997, durante una visita a la tumba de su madre en Althorp. Nunca mencionó la segunda vez, pero sostuvo que es una señal de que necesita dejar salir mucho sufrimiento.

A pesar de los arrepentimientos, Harry imagina cómo sería la vida con su madre y desearía que ella estuviera viva mientras se pregunta qué papel público desempeñaría. Según él: "No hay un día en el que William y yo no deseemos que ella todavía estuviera presente, y nos preguntamos qué tipo de madre sería ahora, y qué tipo de papel público tendría, y qué diferente sería”.

Harry continúa honrando a Diana

Han pasado veinticinco años desde que Harry perdió a su madre, pero continúa defendiendo su legado y sus principios. Anualmente, el príncipe se une a varias organizaciones benéficas y otras ceremonias en su honor.

Unos días antes del 25 aniversario de la muerte de Diana, Harry pronunció un discurso de honor en la Copa Handa Polo Sentebale ISPS en Aspen.

Durante el discurso, sostuvo que le encantaría que la celebración presentara recuerdos de las obras de su vida.

Harry compartiría estos recuerdos con su familia, incluida su esposa, Meghan Markle, y sus dos hijos, Archie y Lilibet. Confesó que deseaba que la hubieran conocido.

Además de desear, Harry intenta conscientemente presentarles a sus hijos a Diana. El padre de dos afirmó que le ha mostrado fotos a Archie y le cuenta sobre la "abuela Diana" a medida que va creciendo.

Archie se familiarizó mucho con el nombre que, después de decir "mamá" y "papá", su siguiente palabra fue "abuela". Harry se siente seguro de que su madre todavía está presente para ayudarlo a formar su familia.

Él cree que ella ayudó a William con sus tres hijos y que, ahora, era su turno. La ausencia de Diana no es suficiente para que sus hijos o nietos la dejen fuera.

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Su familia es parte activa de los millones de fanáticos reales que aún celebran sus servicios humanitarios y lo que representaba. Para ellos, puede que se haya ido, pero nunca la olvidan.