Joven adoptado que luchó por sobrevivir recibe el primer pastel de cumpleaños de su vida

Después de atravesar por muchas dificultades, la vida de un joven cambió inesperadamente cuando el destino lo bendijo con padres amorosos.

Todo niño sueña con tener un hogar con padres cariñosos y hermanos juguetones. Lamentablemente, muchos niños se ven obligados a llevar una vida sin el amor y la atención de sus padres, lo que puede afectar negativamente su bienestar mental y emocional.

Pero es conmovedor notar que innumerables niños han encontrado hogares para siempre y una oportunidad renovada de una vida mejor y más feliz, gracias a la adopción.

Esto fue lo que le sucedió al joven de esta historia, a quien la vida le dio una sorpresa increíble.

Los Walker

Los caminos de Jamie y Joe Walker se cruzaron cuando estaban en segundo año de secundaria. Al crecer en hogares divorciados con un solo hermano, anhelaban estar rodeados de muchos hermanos y un entorno doméstico ruidoso.

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Los dos se casaron después de la universidad, cuando Joe estaba ocupado en la facultad de derecho y Jamie era profesora de secundaria.

Después de que el hombre se convirtiera en abogado de litigios corporativos y Jamie obtuviera su título de posgrado, la pareja decidió formar su familia.

Tras el nacimiento de su primer hijo, los Walker fueron bendecidos con su segundo bebé 20 meses después. Para sorpresa de los padres, más tarde descubrieron que estaban esperando gemelas.

La casa de Joe y Jamie finalmente resonaba con los llantos y las risas de cuatro niños, incluidas sus gemelas.

Una promesa

Cuando sus gemelas ya eran unos meses mayores, la pareja acordó no tener más hijos. Sin embargo, antes de continuar, Joe le pidió a su esposa que le prometiera que algún día considerarían la adopción.

Jamie no pensó mucho en eso entonces porque pensaba que ya no tendría que criar más hijos. Pasó el tiempo y la madre comenzó un nuevo negocio en el verano de 2013 después de ser ama de casa durante dos años y medio.

Joe apoyó a su media naranja y comenzó a buscar nuevas oportunidades para sí mismo. Poco después, la familia se mudó a Waxhaw, Carolina del Norte.

Una nueva aventura

Inicialmente, a los Walker les tomó bastante tiempo establecerse, hacer nuevos amigos y conectarse con sus vecinos.

Durante un viaje de negocios, conocieron a una pareja, Erica y su esposo, Jason. Ellos eran los fundadores de THE RAINING SEASON, un orfanato en Freetown, Sierra Leona, África Occidental.

Joe y Jason se hicieron grandes amigos rápidamente. Los dos disfrutaban conectando sus pasiones compartidas.

Los Walker incluso patrocinaban a niños en el orfanato y donaban siempre que fuera posible. Pero Joe todavía quería hacer algo: deseaba visitar THE RAINING SEASON.

En enero de 2019, Jamie se despidió de su esposo mientras él se preparaba para visitar Sierra Leona por primera vez.

Ella señaló que estaba acostumbrada a que Joe se fuera para ayudar a los niños necesitados. En una ocasión él se embarcó en un viaje a Guatemala con la organización Pencils of Promise en 2018.

Conoció a los chicos del orfanato

Jamie dijo que en principio no sabía nada de Sierra Leona, incluso tenía que buscarla en el mapa. Después de investigar un poco, descubrió que era el séptimo país más pobre del mundo.

Supo que su población de más de siete millones aún se estaba recuperando de las secuelas de la guerra civil. Por otro lado, Joe llegó al país africano y visitó el orfanato. Allí conoció a muchos niños alegres.

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Entre ellos estaba James, un chico bien hablado y confiado. Durante su tiempo juntos, Joe y James practicaron deportes, juegos y tomaron muchas fotografías.

Cuando el hombre regresó a casa, le contó a su esposa acerca del chico. Él deseaba fuertemente ser su mentor. En julio de 2019, Joe regresó al orfanato para ver a James y conoció a su hermano, Abraham.

Una idea loca

Antes de la segunda visita del hombre, James y Abraham habían sido reunidos a la fuerza con su familia. Pero sabían que no pasaría mucho tiempo antes de encontrarse en las calles, luchando por sobrevivir.

Aunque Joe se preocupaba profundamente por los dos hermanos, también deseaba ayudar a los otros niños del orfanato.

Finalmente, llegó el momento de que el hombre se fuera. Cuando llegó a Carolina del Norte, Jamie se dio cuenta de que algo en él era diferente.

Luego, él compartió sus pensamientos con su esposa. Jaime recordó: “Joe se me acercó con la idea de adoptar a los chicos y le dije que estaba loco”.

Un cambio repentino

Jamie mencionó que estaba feliz de brindar asistencia financiera a los hermanos, pero que nunca había planeado la adopción.

Sin embargo, después de unas semanas, decidió reunirse con James y Abraham. Entonces viajó a Sierra Leona en noviembre de 2019.

“Abraham vino corriendo hacia mí, con los brazos abiertos, los ojos brillantes y una sonrisa explosiva. Era más pequeño de lo que imaginaba, pero inmediatamente me sentí a gusto con él”, dijo la madre.

Conoció a James más tarde ese día mientras recorría el orfanato. Él se encontraba entre el grupo de chicos que estaban mirando a Jamie desde un balcón. “Estaban mirando, yo los miré, y luego James sonrió y saludó. Fue magnético. Fue un cambio”, expresó la mujer.

La espera valió la pena

Varias preguntas pasaron por la mente de la madre mientras trataba de comprender sus sentimientos. Como ella y Joe no querían que fuera una decisión improvisada, hablaron y compartieron todo con sus hijos.

La pareja también les preguntó a James y Abraham si les gustaría unirse a su familia. Una vez que todo se resolvió, los Walker comenzaron el proceso de adopción alrededor del Día de Acción de Gracias de 2019.

En enero de 2020, Joe y sus dos hijos biológicos visitaron a James y Abraham en Sierra Leona. Allí los jóvenes crearon un vínculo al instante.

Poco después, el mundo se familiarizó con la pandemia de COVID-19. La implementación de procedimientos de seguridad significó un procesamiento lento de la documentación, lo que molestó profundamente a los Walker.

Finalmente, en octubre de 2020, Joe y Jamie se convirtieron en los tutores oficiales de los dos hermanos.

Experimentaron muchas cosas por primera vez

Después de una prolongada negación y desvíos, los Walker recibieron la aprobación para adoptar a los hermanos en los Estados Unidos en septiembre de 2021.

El 5 de noviembre de ese año, Joe regresó a Carolina del Norte con dos nuevos miembros de la familia Walker: James y Abraham.

Desde que se convirtieron en una familia de ocho, los Walker han celebrado innumerables momentos juntos. Muchos de estos fueron experimentados por primera vez por los dos hermanos.

Desde cosas cotidianas como escaleras mecánicas y lavado de autos, hasta Acción de Gracias y Navidad, James y Abraham continúan experimentando alegría y amor con su nueva familia.

El primer día de clases de los hermanos en Estados Unidos requirió una celebración masiva, al igual que sus cumpleaños. Nunca habían estado acostumbrados a tener pasteles, soplar velas, recibir regalos y recibir una cálida sorpresa en su día especial.

Lágrimas de alegría

Para el primer cumpleaños de Abraham en mayo de 2022, los Walker lo sorprendieron con un pastel temático con sus cosas favoritas: un auto de juguete y una carrera de obstáculos.

Pero lo más importante, el pastel tenía su nombre y estaba destinado a celebrar su hermosa existencia. Cuando el chico vio el pastel y todos se reunieron en la sala solo para él, no pudo contener las lágrimas.

Fue una celebración de cumpleaños increíblemente conmovedora con su familia que nunca olvidaría. “James y Abraham nos han dado mucha perspectiva sobre lo que es importante, lo que damos por sentado y lo importante que es la familia”, dijo la mujer.

Un momento emotivo

En junio de 2022, los Walker organizaron otra fiesta sorpresa, esta vez para James. Un breve video mostró al joven sentado cómodamente al otro lado de la mesa cuando apareció ante él un pastel iluminado por velas.

Como era de esperar, no pudo controlar sus emociones y corrió directo a los brazos de su madre, abrazándola como si nada más importara.

Una gran muestra de amor

Jamie compartió el clip en las redes sociales y lo acompañó con una leyenda conmovedora. Una parte de esta decía: “El abrazo más intenso que he tenido. Pude sentir su alegría, su gratitud, su esperanza, su amor, su todo. Todo estaba allí”.

La madre notó que ella y Joe no eran expertos en adopción, pero algo les tocó el corazón cuando conocieron a James y Abraham.

Afortunadamente, fue un sentimiento mutuo y lo suficientemente fuerte como para unirlos y fomentar lazos familiares duraderos.

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Esperamos que los Walker continúen celebrando muchos más momentos valiosos con James, Abraham y sus otros hijos. Si esta historia tocó tu corazón, no dudes en compartirla con tu familia y amigos.