Mamá colapsa en el funeral de su hijo: se despierta cerca de su bebé, del que no sabía nada - Historia del día
Shannon era una madre soltera que pasaba por muchas dificultades; tenía dos trabajos para brindarle a su hijo una excelente educación. Todo lo que quería era que se convirtiera en un exitoso abogado, pero Billy tenía planes muy diferentes.
Shannon entró en su pequeño apartamento y se derrumbó en el sofá. Estaba agotada y solo tenía una hora antes de salir hacia su segundo trabajo.
"¡Mami, mira lo que hice hoy!".
El hijo de Shannon, Billy, corrió hacia ella, y le regaló una guitarra hecha con cuerdas y una vieja caja de cereal.
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Unsplash
"Eso es maravilloso" afirmó Shannon, con una gran sonrisa.
"Algún día seré un músico famoso", afirmó el niño con convicción.
Shannon negó con la cabeza.
"La música es un gran pasatiempo, Billy, pero no paga las cuentas. Vas a ser abogado. Esa es una mejor profesión".
Billy frunció el ceño. Shannon se acercó para envolverlo en un abrazo.
"Eres muy chico para entender estas cosas en este momento, cariño, pero es importante conseguir un trabajo con el que te ganes bien la vida".
"Está bien, mamá".
Revolvió el cabello de Billy. "Vamos a encargarnos de la cena".
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels
Shannon le preparó a Billy un sandwich de queso asado y se sentó su lado mientras él comía. Aunque también tenía hambre, no tenían suficiente comida para dos.
Desde que su esposo los había abandonado, Shannon trabajaba muy duro para asegurarse de que Billy algún día fuera a la universidad y se convirtiera en abogado. Ahorraba la mayor cantidad de dinero posible, incluso si eso significaba pasar hambre algunos días.
Estaba decidida a asegurarse de que a Billy le fuera bien en la vida. No fue fácil, pero sintió que todo su sufrimiento había valido la pena cuando la mejor universidad del estado le ofreció una beca. Estaba muy orgullosa de su hijo hasta la primera vez que vino a visitarla.
Billy entró por la puerta con dos estuches de guitarra. Su cabello había crecido demasiado para un estudiante de derecho, y le dedicó una sonrisa tímida.
"¿Qué es eso?". Shannon señaló los estuches de las guitarras. "Deberías gastar tu dinero en cortes de pelo, no en pasatiempos frívolos".
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels
"No es un pasatiempo". Billy se frotó la nuca. "Tenía la intención de decirte… la ley no funciona para mí, mamá. Estoy estudiando música ahora".
"Espero que sea una broma, William. No me esforcé con dos trabajos y pasé hambre para que pudieras ser un músico vagabundo".
La expresión de Billy se volvió severa. "No es una broma. La música es mi pasión y sé que tendré éxito porque es algo que amo hacer con todo mi corazón".
"¿Me estás tomando el pelo?", gritó Shannon. "¿Crees que tocar en las esquinas de las calles te hará millonario? ¡No puedo creer que hicieras eso! ¡Vas a volver a la facultad de derecho tan pronto como regreses a la universidad!".
"No, no lo haré. Esto es lo que debo hacer, mamá. Lo siento con cada fibra de mi ser".
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels
"Sacrifiqué tanto por ti, y así es como me lo pagas". Ella señaló la puerta. "¡Fuera! No eres bienvenido aquí hasta que recuperes el sentido común. Actúas como tu padre, y terminarás igual de mal si no te recompones".
"¡Yo no soy como él! Y te lo demostraré". Billy cargó su equipaje al hombro y salió por la puerta.
Shannon estaba segura de que Billy regresaría eventualmente y se disculparía. Volvería a la facultad de derecho y podrían olvidarse de este lío.
Sin embargo, Billy no regresó esa noche ni al día siguiente. Trató de llamarlo, pero él no le atendía. A medida que los días se convirtieron en semanas, Shannon comenzó a sentirse completamente desesperada.
Buscó a sus viejos amigos de la escuela y descubrió que Billy se había transferido a una universidad en un estado diferente. Todavía colgaba cada vez que Shannon intentaba llamarlo.
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels
La ira y la incredulidad hervían en las venas de Shannon. ¿Cómo podía Billy hacerle eso? Pensaba que había hecho un excelente trabajo al criarlo a pesar de todos los desafíos que tuvo que enfrentar.
Estos sentimientos se desvanecieron después de unos meses. Shannon comenzó a preocuparse por cómo estaba Billy. Trató de llamarlo nuevamente cuando se acercaban las fiestas navideñas, pero recibió un mensaje de que el número ya no existía.
Shannon entró en pánico. Acudió de nuevo a los amigos de Billy, que la habían ayudado antes, y averiguó el nuevo número de su hijo. Lo marcó inmediatamente.
"Hola, ¿quién habla?", contestó Billy.
"¡Billy! Por favor, no cuelgues. He estado tan preocupada por ti".
"¿Mamá?".
"Sí, soy yo". Shannon se sintió abrumada por la emoción y a punto de comenzar a llorar. "Siento mucho haber peleado contigo, cariño".
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Unsplash
"Yo también lo siento, mamá. Te amo y te he extrañado mucho, pero tenía que hacer lo correcto para mí". Billy se aclaró la garganta. "Me alegro de que hayas llamado, porque tengo noticias importantes que darte".
"¿En serio? ¡Cuéntame!". Shannon se enderezó. ¿Podría Billy haber regresado a la facultad de derecho?, se preguntó.
"Me voy a casar. Su nombre es Teresa".
"¡Eso es maravilloso! ¿La conociste en la universidad?".
"No exactamente. Teresa era camarera en una cafetería cercana a la universidad. Así fue como nos conocimos, pero ya no trabaja allí".
¿Un barista? Shannon confiaba en que Billy podría conseguir alguien mejor, pero tal vez estaba siendo demasiado rápida para juzgar.
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Unsplash
"¿Y dónde trabaja ahora?", preguntó Shannon.
"Ella está dedicando su tiempo a su arte. Su trabajo es increíble".
El corazón de Shannon dio un vuelco. "¿Arte? ¿Es pintora?".
"Teresa es una artista digital".
"¡Dios mío! Billy, ¿cómo diablos va a funcionar esto? Los artistas y los músicos no ganan dinero. ¿De qué van a vivir?".
"Y aquí vamos de nuevo", se quejó Billy. "¿Por qué es tan difícil para ti creer que puedo tener éxito haciendo algo que amo?"
"Porque sé cómo es el mundo real, Billy. En este momento, tu cabeza está llena de sueños. Crees que puedes hacer que cualquier cosa suceda, pero la vida no es así. Todo lo que he hecho es tratar de ahorrarte el sufrimiento de vivir en la pobreza".
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels
"Ojalá pudieras ser feliz por mí. Adiós, mamá".
Y eso fue todo. Shannon lamentó que su hijo insistiera en tomar decisiones tan precipitadas y descuidadas con su vida, pero sabía que no podía hacer nada para detenerlo.
Pasaron varios años sin escuchar una palabra de Billy. Un día, Shannon se detuvo en la tienda para comprar leche y escuchó a unos niños tocar una canción alegre en su automóvil. Escuchó la misma melodía pegadiza al día siguiente de sus vecinos.
Dondequiera que fuera, Shannon escuchaba la misma canción sonando en todas partes. Se quedó grabada en su mente. Había dejado de escuchar la radio hacía años porque le recordaba a Billy, pero ahora la volvió a encender para escuchar esa canción.
Shannon asintió con la cabeza cuando la melodía familiar sonó a través del altavoz. Ella estaba lavando los platos, y cuando el locutor de radio anunció el nombre del cantante, se le cayó lo que tenía en sus manos.
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels
Después de todo, Billy había tenido éxito. Shannon se secó las manos y se apresuró a llamarlo.
"Habla la oficial Campos", dijo la mujer que contestó el teléfono. "¿Quién está llamando?".
"Soy la mamá de Billy. ¿Por qué está contestando su teléfono?".
"Mis disculpas, señora. Lamento mucho informarle que su hijo estuvo involucrado en un grave accidente de motocicleta. No sobrevivió".
La oficial siguió hablando, pero Shannon no escuchó nada más que un zumbido en sus oídos. Billy se había ido. Nunca volvería a ver a su hijo y nunca tendría la oportunidad de disculparse con él.
Shannon descubrió que Billy sería enterrado en su ciudad natal. Revisó sus posesiones de la infancia y decidió tomar la guitarra de caja de cereal que él había hecho para colocarla sobre su ataúd.
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels
Cuando llegó al funeral, Shannon se derrumbó. Después de todos los años de esfuerzo, parecía tan injusto que su hijo estuviera en su ataúd en la flor de su vida. Se había dejado barba. Le quedaba bien, pero ella nunca podría decírselo.
Sus sollozos se convirtieron en gemidos. Alguien la tomó por el codo, pero Shannon se apartó. Le gritó a la persona que la dejara en paz y le suplicó a Billy que la perdonara por ser tan rígida y crítica.
Cuanto más lloraba, más giraba el mundo a su alrededor. Puso su mano sobre el ataúd para ayudarse a mantener el equilibrio. De repente, empezó a ver puntos negros y lo último de lo que Shannon fue consciente era que se desplomaba sobre su hijo muerto.
Se despertó con los sonidos de un bebé. Abrió los ojos y pensó que debía estar en el cielo. ¡El niño amarrado en el asiento del automóvil a su lado tenía los mismos ojos marrones que Billy!
"¿Quién eres, pequeño bebé?", preguntó Shannon. El bebé le sonrió y agitó las manos. ¡Tenía los hoyuelos de Billy!
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels
Luego, una joven desconocida detrás del volante del auto llamó su atención: "Ese es tu nieto".
Shannon se enderezó. Quien le hablaba era una mujer vestida de negro con el cabello bien peinado.
"¿Mi nieto? ¿Eres Teresa?".
La mujer la miró a través del espejo retrovisor. "Parece que sabes más que yo. Billy me dijo que sus padres estaban muertos. Imagina mi sorpresa cuando los paramédicos encontraron tu identificación y me dijeron que eras su madre".
Shannon frunció el ceño. "Billy estuvo muy enojado conmigo durante los últimos años. No volvimos a hablarnos, así que supongo que fue más fácil para él decirle a todos que estaba muerta".
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Unsplash
Teresa suspiró. "Bueno, no podemos cambiar el pasado, pero podemos hacer algo diferente a partir de hoy. Los paramédicos dijeron que debes descansar en un ambiente tranquilo. No sé dónde vives, así que vamos al hotel donde el pequeño Santiago y yo nos quedamos".
Shannon miró al bebé. Este era su nieto, Santiago.
"Se parece tanto a Billy", dijo Shannon.
"Lo sé".
Shannon se sorprendió de que Teresa y el bebé se hospedaran en un hotel de lujo. Se dio cuenta de que Billy había tenido razón acerca de tener éxito en hacer algo que amaba.
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Unsplash
Pasó casi toda la noche conversando con Teresa. Shannon le explicó cómo ella y Billy se habían distanciado.
"Ahora veo que me equivoqué al dudar de él, y me equivoqué al juzgarte".
Teresa negó con la cabeza. "Lo entiendo, Shannon. De una madre a otra, entiendo que solo estabas tratando de cuidar a Billy. Pero él era muy terco y sabía bien lo que quería en la vida. Lamentablemente, me parece que esa terquedad la heredó de ti y por eso ninguno cedió".
Shannon asintió con tristeza. "Escuché su canción en la radio. Todo el mundo la está tocando", comentó.
"Ha sido el número uno en todo el país durante dos semanas", dijo Teresa. "Él se dirigía a reunirse con algunos amigos para celebrar cuando se estrelló. Un conductor ebrio se saltó una intersección".
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Unsplash
Su voz se quebró y Shannon se acercó para consolarla. Cuando Teresa comenzó a llorar, ella también lo hizo, y las dos mujeres se abrazaron. Compartían un dolor muy profundo.
Se hicieron amigas después de eso, y no pasó mucho tiempo antes de que Teresa le pidiera que la apoyara en la crianza de Santiago. Estaba recibiendo muchos encargos por su arte digital y pensaba que era mejor que pasara más tiempo con su abuela en lugar de contratar niñeras.
Shannon aceptó de inmediato. Adoraba a Santiago y se aseguró de no repetir los mismos errores que había cometido con Billy. Cuando el niño le pidió que le comprara una guitarra para su duodécimo cumpleaños, ella accedió sin dudarlo.
Se sintió muy orgullosa cuando, en compañía de Teresa, vieron a Santiago actuar en el concierto de su escuela. Había heredado el talento de su papá y Shannon lo animaba a practicar todos los días.
Santiago creció y se convirtió en un músico famoso. Cada vez que un entrevistador le preguntaba sobre su camino hacia el éxito, siempre mencionaba el amor y el apoyo constante de su abuela.
Imagen con fines ilustrativos | Foto: Pexels
¿Qué podemos aprender de esta historia?
- Respeta las decisiones de vida de tus hijos: La fijación de Shannon en que Billy se convirtiera en abogado causó mucho daño a su relación, y todo podría haberse evitado si ella hubiera confiado en su vocación y sus decisiones.
- No puedes cambiar el pasado, pero puedes aprender de él: Todos cometemos errores, pero mientras estemos dispuestos a aprender de ellos y perdonarnos unos a otros, siempre habrá un camino a seguir.
Comparte esta historia con tus amigos. Podría alegrarles el día e inspirarlos.
Te puede interesar: "Ojalá estuvieras aquí papá", llora novia huérfana y se sorprende cuando un grupo de policías llega a la boda - Historia del día
Este relato está inspirado en la vida cotidiana de nuestros lectores y ha sido escrito por un redactor profesional. Cualquier parecido con nombres o ubicaciones reales es pura coincidencia. Todas las imágenes mostradas son exclusivamente de carácter ilustrativo. Comparte tu historia con nosotros, podría cambiar la vida de alguien. Si deseas compartir tu historia, envíala a info@amomama.com.