Vecinos llamaron a la policía después de ver lo que estaban haciendo padre e hija en el patio trasero

Ambos fueron juzgados en el tribunal por su horrendo crimen.

De acuerdo a lo reseñado por New York Post el 4 de marzo de 2018, padre e hija fueron detenidos por la policía de Panamá City.

Según un artículo publicado por el New York Post, un padre y su hija fueron detenidos por tener relaciones sexuales en el patio trasero de una casa en Panamá City.

El padre, Justin Bunn, de 39 años, y su hija, Taylor Bunn, de 19 años, fueron arrestados luego de que los testigos se pusieran en contacto con la policía de la localidad ubicada en Florida y expresaran la vergonzosa queja.

A las 11 a.m. del 18 de febrero, la policía recibió una llamada que indicaba que padre e hija fueron vistos teniendo relaciones sexuales en la posición del misionero.

El incidente tuvo lugar en el patio trasero de su casa independiente en la calle East Fifth, donde afortunadamente, acudió un equipo de oficiales de manera inmediata para investigar el asunto.

Al ser cuestionados tanto el señor como la señorita Bunn, confesaron su crimen aunque afirmaron que era un incidente aislado y que nunca habían tenido relaciones sexuales, notificó un oficial a los medios.

Así mismo, se conoció que la residencia donde fueron vistos, es propiedad de un amigo de Justin Bunn, y que al parecer ellos no eran los únicos dentro de la casa al momento del incidente.

Los informes también mencionan que el hijo adolescente de Bunn estaba en una de las habitaciones de la casa mientras él estaba teniendo relaciones sexuales con Taylor.

El dueño del lugar también mencionó que el chico estaba comenzado a aceptar la relación física existente entre su padre y hermana.

Días más tarde, el dúo fue juzgado en la corte por cargos de incesto, donde el juez a cargo dictaminó que padre e hija deben cortar todo tipo de vínculo, además de fijar una fianza de 5 mil dólares para el hombre y mil para la adolescente.

Después del juicio, tanto Justin como Taylor Bunn fueron liberados tras la cancelación de las fianzas establecidas.

El estatuto del Estado de Florida establece que el incesto es un delito de tercer grado y que se castiga con hasta 5 años de prisión, además de una multa de 5 mil dólares.