Hombre mayor habla con una chica joven. Luego se quita los zapatos y un transeúnte toma una cámara

La imagen habla por sí sola.

De acuerdo a lo reseñado por Newsner el 6 de marzo de 2018, esta conmovedora fotografía difundida por primera vez en 2012, fue captada en Rio de Janeiro, Brasil, pero esto nunca ha podido ser verificado.

Un usuario de la red social Reddit fue el primero en difundir la imagen en el año 2012, y aunque no se tenía información acerca de lo que sucedía al momento de ser captada, la solidaridad y el agradecimiento eran evidentes en ella.

Para nadie es un secreto la gran cantidad de personas que aún viven en pobreza extrema, carentes de un lugar donde dormir, alimentos, vestimenta y calzado.

Aunque existen naciones que han minimizado los índices de pobreza dentro de su territorio, existen otros en los que gran cantidad de sus habitantes sobreviven gracias a la solidaridad de quienes se conmueven ante su situación y les tienden la mano.

Brasil es famoso por su gente, bellezas naturales, y la fiesta de carnaval mas excéntrica y multitudinaria del mundo, misma que se da en Rio de Janeiro, localidad que alberga una de las barriadas más grandes del mundo.

En Rio, los barrios donde residen personas de escasos recursos son llamados favelas, que por su extensión y particularidades, se han convertido en un extraño destino turístico para quienes están dispuestos a arriesgarse y adentrarse en sus pequeñas calles y grandes escalinatas.

Es por ello que se asume que la imagen que se describirá a continuación, fue tomada en el paradisíaco balneario, debido a su ambiente tropical mezclado con edificaciones propias de una gran ciudad.

La fotografía muestra a un hombre canoso entregando su calzado a una adolescente que parecía estar en situación de calle, mientras lloraba de agradecimiento.

Un gran hombre, dice al pie de la misma fotografía que fue publicada hace pocos días en un portal de noticias.

Aunque han transcurrido seis años desde lo ocurrido, la buena acción de ese desconocido continúa llegando a quienes están dispuestos a poner su grano de arena y mejorar el mundo.

Si bien la historia detrás de la fotografía no parece que llegará a conocerse, el registro de una buena acción como esta deja ver que un buen corazón es capaz de entregar lo que otro necesita, aunque eso implique caminar descalzo por la calle.

Esperamos que gestos como estos continúen en auge y que su mensaje llegue a los lugares más recónditos del mundo, donde siempre habrá alguien necesitando que le tiendan la mano.