Niño va a urgencias pensando que tiene un lápiz en la oreja. Pero el doctor encuentra una batería
Un niño que visitó al doctor porque se le quedó atorado un lápiz en una de sus orejas descubrió que tenía un problema mayor que podía complicar su sistema auditivo. El médico que lo atendió, además de sacar el elemento para escribir, le retiró una batería.
Un menor fue llevado a un hospital cuando dijo que tenía un lápiz clavado en la oreja, pero la verdad se trataba de otra cosa que causaba su molestia auditiva. A pesar de que el oído es un órgano sensible y pequeño, le puede caer todo tipo de suciedad. Incluso algunos pequeños objetos o insectos pueden quedar atrapados en la cavidad auditiva.
Según el portal Jumble Joy, los padres estaban conmocionados cuando su hijo les dijo que tenía un trozo de lápiz dentro de la oreja. Luego de rascarse con dicho objeto, el lápiz se partió y una pequeña parte quedó atrapada en su oído.
Sin embargo, el niño no se lo contó a su familia inmediatamente después del incidente. Esperó una semana antes para contárselo a sus padres, por miedo a que estos le dieran alguna clase de regaño o castigo.
Los médicos estaban preocupados porque la situación podría ser más grave de lo que pensaban. El hecho de que hubiera transcurrido una semana no facilitó la tarea de los médicos.
El doctor Philip Russell afirmó que lo peor que podría pasar es una infección muy fuerte, la cual podría afectar su equilibrio auditivo, coordinación y si se deja prolongar más, el niño podría quedar sordo.
La sorpresa de todos fue cuando estaban realizando el procedimiento y los doctores sacaron el lápiz, pues además de este elemento había una pequeña batería de reloj. El menor nunca supo cómo llegó esa pila a su oído.
Aunque los doctores pudieron sacar los elementos incrustados en la oreja del pequeño, el incidente había dañado el tímpano de Lewis King y no tenía ninguna clase de arreglo.