Hombre con rara enfermedad en los huesos se casó con el amor de su vida y mostró que el amor prevalece
Al nacer, el cuerpo de Sean Stephenson tenía tantos traumas que no se esperaban que sobreviviera.
La mayoría de sus huesos se rompieron durante el parto, y los médicos pronto determinaron que el bebé tenía una rara afección llamada enfermedad de huesos frágiles, como informó el portal Western Journal.
Para cuando tenía 18 años, Stephenson había soportado más de 200 fracturas en su cuerpo. La enfermedad atrofió su crecimiento, dejándolo con una altura de 2 pies y 8 pulgadas de alto.
A pesar de que vive con desafíos físicos, Stephenson está decidido a vivir de la mejor manera posible. Aprendió el arte de hablar en público, entregando poderosos mensajes de motivación a audiencias de todo el mundo.
En 2009, Stephenson conoció a Mindie Kniss a través de un amigo en común. La pareja se flechó y comenzó a salir.
En 2012, Stephenson vio a su novia caminando por hacia el altar para convertirse en su esposa. La pareja estaba rodeada de amigos y familiares que deseaban lo mejor para ellos en su nueva vida.
"Es una alegría estar casado con esta mujer", dijo Stephenson. "No pasa un día en que no le diga que la amo como 8,000 veces".
Aunque Stephenson y Kniss están felizmente casados, han recibido muchas opiniones con burlas crueles sobre su relación. Algunos, quienes son completos extraños dicen que Kniss nunca podría estar feliz de estar casada con un hombre con una discapacidad física.
Que Kniss estaba allí por el dinero, dice la gente. Además que ella se estaba haciendo cargo del estado de su marido.
Pero Kniss y Stephenson saben la verdad sobre su matrimonio, y eso es todo lo que importa. La pareja reside en Scottsdale, Arizona, trabajando como entrenadores de vida y oradores motivacionales.
La pareja luchó con la idea de tener hijos biológicos, pero pronto se encontró con un camino que podría ser perfecto.
Después de conocer a niños huérfanos que viven en África, los corazones de la pareja se conmovieron con la idea de que algún día, quizás, adoptaran un hijo propio.
Ellos creen firmemente que no existe un matrimonio perfecto, el suyo incluido. Pero el amor incondicional es una elección, y ellos dos están comprometidos, aún en los tiempos difíciles y un amor que es fiel, leal y abnegado.