Mujer que solía ser Amish hace franca confesión sobre su escape de la comunidad
La autora de la novela "Runaway Amish Girl" (Chica Amish Escapada) confesó cómo solía ser su vida antes de lograr escapar de su hogar.
Emma Gingerich pasó más de diez años viviendo por su cuenta y sin saber nada de su familia luego de escapar de ellos y de la comunidad Amish donde vivían juntos, en el estado de Ohio, EEUU. Luchó por sobrevivir sola en el mundo, sin apoyo de parientes o amigos y sin casi ninguna educación.
Gingerich escribió un libro sobre su experiencia, terminando la escuela secundaria y luego obteniendo un título universitario. Gingerich confesó los detalles de su terrible experiencia en una reveladora entrevista con Megyn Kelly en el show "Today".
La mujer, hoy en día de 30 años, sólo recibió educación primaria básica en todos los años que pasó en su pueblo natal junto a su familia Amish. La mayoría de las lecciones que recibió fueron en un dialecto regional del idioma alemán, y su escolaridad llegó a su fin a los 14 años.
Luego de recibir esa escueta educación en su comuinidad, Gingerich fue obligada a participar en un sinfín de quehaceres y labores domésticas cotidianas, además de servir de niñera para 13 hermanitos, con quienes compartía el hogar familiar donde ella misma nació, creció y recibió su mísera educación.
La comunidad Amish a veces es pintada de manera idílica en los medios hoy en día, principalmente en literatura y televisión, como un paraíso de tiempos más simples y pacíficos. Pero como cuenta Gingerich, sólo se ve hermoso desde lejos, y la realidad de ser parte de estas comunidades es muy diferente.
En el caso de GIngerich, como en la mayoría de las comunidades Amish hoy en día, vivían sin ningún tipo de energía eléctrica ni instalaciones sanitarias, rechazando los avances de la tecnología por razones religiosas.
Además, siguen muy estrictas restricciones en cuanto a la vestimenta. Las mujeres deben vestirse de forma modesta, con vestidos que lleguen a los tobillos y gorros para cubrir todo su cabello. A los 16 años, contraen matrimonio en ceremonias arregladas por sus padres con años de antelación.
Mira el video de la entrevista de Gingerich con Megyn Kelly a continuación.
Cuando Gingerich comenzó a trabajar para familias de la localidad que no eran Amish, se dio cuenta de que el mundo era mucho más grande de lo que jamás se había imaginado antes.
Supo de la existencia de los automóviles, y de diferentes tecnologías usadas alrededor del mundo, y se dio cuenta de que se estaba perdiendo de muchísimas cosas en la vida.
12 años después de su drástica decisión, Gingerich dice que no se arrepiente de nada, y que está orgullosa de la forma en que ha vivido su vida. A pesar de que echa de menos a su familia, dice que jamás sería capaz de volverse a adaptar a la sociedad Amish.