Obispo que pide austeridad justifica el uso de su auto de lujo
Cuando surgieron las críticas en contra del sacerdote, el religioso en su defensa usó un argumento que pocos le creen.
Un video que recientemente publicaron en las redes sociales muestra al obispo de Saltillo, Raúl Vera, parqueando un auto de lujo en el centro histórico de la ciudad, trayendo de inmediato la controversia por la posesión del presbítero de ese tipo de vehículo.
Sin embargo, Vera se justificó diciendo que el automóvil no era de él, pero que a pesar de no ser de su propiedad lo necesita.
Recordó que aunque tienen un ingreso, no cuentan con millones de dólares como para adquirir ese carro, publicó el Diario Mexicano.
"No es propiedad mía (…) Lo necesito, claro que lo necesito. Nosotros según la ley tenemos un ingreso, pero no es propiedad privada, desde que soy fraile no tengo propiedades privadas", dijo Raúl Vera.
Cabe recordar, que según el Diario de Colima el religioso había pedido a los funcionarios que se rebajaran que perciben por ser muy altos.
Asimismo se negó a revelar de cuánto dispone la Diócesis de la localidad, para costear los servicios de su persona.
Mira el video del cura que causó controversia.
Tras la grabación, el sacerdote mencionó un presunto accidente que sufrió cuando viajaba en un un auto que fue impactado por un transporte pesado, y después de eso, según él, la Diócesis de Saltillo pidió que se adquiriera para su uso personal un auto Honda Accord 2018.
Resulta que cuando tuvo el siniestro de tránsito, el vehículo en el que viajaba era austero, por lo que tomaron la decisión de que tuviera un automóvil más grande y equipado.
“Se me cerró un tráiler en el periférico de Monclova y salí tan dañado que las personas de la Diócesis me dijeron que por favor no dejaran al obispo viajar así, tiene que tener un carro con bolsas de aire y tenga todo lo que tiene”, aseguró.
Cuando le consultaron por el chófer, el prelado aseguró que el servicio lo comparte con el obispo emérito Francisco Villalobos, “con él duró 18 años y también está conmigo y maneja cuando salimos de la ciudad”.
Y a pesar de las duras críticas recibias, el religioso insistió en que los magistrados de la Suprema Corte y los legisladores de ambas cámaras no sigan percibiendo sueldo elevados y prestaciones y bonos extras, para que así puedan reconciliarse con el pueblo.
Sobre esto, las críticas recibidas se deben a que el cura no solo tiene un auto cómodo con equipamiento básico, sino que el automóvil cuenta con grandes lujos como pantalla central con sistema de infoentretenimiento, controles en el volante y acabados de primera, entre otras amenidades.
El precio estimado de dicho auto va de los 458 mil hasta los 580 mil pesos, para la versión más lujosa, reveló Diario de Colima.