El precio mortal de tomarse selfies al borde de esta peligrosa cascada
Dos personas han muerto en los últimos dos años cayendo de la cascada Kaaterskill, en el intento de sacarse una buena selfie para Instagram.
Esta impresionante caída de agua, ubicada en el estado de Nueva York, atrae a miles de turistas anualmente que buscan disfrutar no solo del delicioso estuario, sino también de las impresionantes vistas que este paraíso ofrece. Sin embargo, hay quienes subestiman la altura y las condiciones del lugar.
Según Inside Edition, en la cima de la caída las rocas son muy resbalosas, por lo que el ente encargado del mantenimiento del lugar ha sido muy claro con las reglas a seguir para poder estar ahí, sin embargo, no todos las acatan y es ahí cuando llegan los accidentes.
"Han ocurrido muertes en esta área. Aléjese del borde del precipicio", se lee en una de las señales de advertencia que abundan por el parque.
Una de las lamentables fatalidades a causa de la desobediencia y la vanalidad, fue la de Ezra Kennedy, de 17 años, quien en 2016 se resbaló de una piedra y cayó mientras posaba para una foto. Y es que al parecer se ha vuelto tendencia tomarse selfies en lugares que sobrepasan los niveles de peligrosidad coherentes.
"Ezra no era una persona intrépida, creo que solo quería tomarse una buena foto. Tanto excursionistas expertos, como novatos han se han perdido aquí", reflexionó la madre del chico fallecido.
El adolescente es una de las ocho personas, desde 1992, que han fallecido por no obedecer las normas de seguridad del la cascada. Y de acuerdo a The New York Times, la popularidad que este paisaje ha estado obteniendo a través de las redes sociales ha empeorado el problema.
El guardabosques Rob Dawson asegura que de esas ocho personas, cuatro han muerto mientras posaban para una fotografía, por lo que responsabiliza directamente a los medios de comunicación y a las redes sociales, pues asegura que ha conversado con gente que dice haber ido a hacer las poses que vieron en línea.
"Lo lamentable es que en esas fotos no hay algo que le informe a las personas que también podrían terminar gravemente heridas", opinó Dawson.
Cabe destacar que las autoridades se han encargado de hacer caminos y señaléticas que resguarden la vida del visitante, pero aun así, las personas se salen de los senderos preestablecidos para tomar una buena foto y es ahí cuando se acercan a los precipicios y surge el peligro.
Al parecer las modas que nacen en las redes sociales poco consideran las consecuencias de estas ideas en la vida real, lo cual es realmente preocupante, ya que miles y miles de personas se atreven a reproducir cualquier hazaña que ven en sus pantallas, sin pensar en que de hecho, podrían perder la vida haciéndolo.