Médicos dicen que no hay esperanza para bebé sin parte del cerebro, y ella probó lo contrario
La madre de la bebé era una adolescente prostituta que la dejaba durmiendo en el piso, rodeada de basura.
No todos los niños tienen la fortuna de nacer sanos o con padres cariñosos, algunos llegan al mundo por la ruta difícil y Nika es una de esas personas. La bebé nació en Haití con un par de condiciones que pueden ser letales incluso en un país con todos los recursos médicos a disposición.
De acuerdo a la información publicada por The Advetiser, la vida de este pequeña comenzó a cambiar cuando Sarah Conque llegó a Haití junto a la fundación Danita's Children para participar como voluntaria en el centro médico de la organización sin fines de lucro.
Allí Sarah conoció a Nika, cuando su mamá la llevó para tratar su hidrocefália, aunque por alguna razón mintió diciéndo que su hermana era la verdadera madre de la bebé, por lo que ella se quedó a su cuidado, informó God Updates.
UN DIFÍCIL COMIENZO PARA NIKA Y SARAH
A pesar de haber descubierto la mentira Conque ayudó a la muchacha y a su bebé, incluyéndola en un programa de un hospital de la capital haitiana, en el que operan a niños con hidrocefália.
Así fue como según Life Site News, Nika fue sometida a su primera cirugía a los 5 meses de nacida. Por desgracias la madre de la niña abandonó el centro asistencial mientras su hija estaba en recuperación.
LA MAMÁ DE NIKA NO SE INTERESABA POR SU BIENESTAR, ASÍ QUE SARAH SE HIZO CARGO
Aunque volvió al poco tiempo, Sarah tuvo que batallar con ella para que le brindara el ciudado necesario a su hija llevándola a las citas médicas y participando en los programas que ayudarían a mejorar su salud exponencialmente.
Sin embargo, la adolescente hizo caso omiso de todo, por lo que a Conque no lo quedó más remedio que actuar con contundencia. Sarah fue hasta la casa de la joven y de la bebé y se encontró con Nika sola, desnutrida yacostada sobre un saco de arroz, rodeada de basura y perros.
UN PRONÓSTICO DESALENTADOR
A sus 11 meses apenas pesaba aproximadamente 2 kilos y el líquido en su cerebro había reaparecido. Al encontrar a la niña en un estado deplorable, Sarah se la llevó al orfanato con la bendición de la mamá.
Pero las malas noticias continuaron cuando los médicos descubrieron que la enfermedad que mantenía a la bebé en peligro en verdad era hidranencefalia, una condición en la que el cerebro crece incompleto y en su lugar, solo hay líquido.
A pesar de que los órganos de la niña comenzaron a fallar y de que los médicos dieron un pronóstico desalentador diciéndo que solo un milagro la salvaría; Conque lo hizo posible y la llevó a Florida.
"Consultamos con varios médicos estadounidenses", dijo Sarah y agregó: "Dijeron que probablemente la íbamos a perder. Hablamos vida sobre ella, rezamos por milagros".
NIKA ES UN MILAGRO VIVIENTE
El 99% de los bebés con esta condición mueren en el primer año. Pero un médico realizó la cirugía sin costo alguno, lo que fue una bendición para Sarah, pero especialmente para la niña quien es la protagonista de una historia milagrosa.
"Perdió cinco libras de líquido y dos pulgadas de altura de su cabeza. Ha cambiado dramáticamente su calidad de vida", aseguró Sarah.
Conque no se quedó con solo salvar la vida de la pequeñita, también decidió adoptarla, y a pesar de mantener contacto con su madre biológica, Sarah ama a Nika como su propia hija, por lo que nunca dejará de luchar por ella, quien a todas luces, es un verdadero milagro.
NIÑOS CON TEMPLE SOBRENATURAL
En otra historia que demuestra la fuerza que tiene el amor paternal, un bebé que fue condenado a muerte antes de nacer, superó todo los pronósticos y llegó al mundo para vivir una vida normal.
A las 23 semanas de gestación los médicos le dijeron a Drew y Ariann Corpstein que lo mejor sería abortar a su hijo Matthew, ya que venía con malformaciones severas. Pero los futuros padres mantuvieron la esperanza viva y continuaron con el embarazo, informó CBN News.
Al término del embarazo, Matthew James nació con excelentes signos vitales, la única preocupación era una hidrocefálica que posteriormente fue drenada, dejando al niño perfecto y listo para tener una vida normal, como cualquier otro.
La esperanza y la disciplina con los tratamientos generan estos resultados, es por ello que en una historia similar, 4 niñas sobrevivientes del cáncer posaron juntas para recrear una fotografía que se tomaron cuando estaban en plena batalla por sus vidas. Sin duda, un momento inspirador que vale la pena ver.