Estas son algunas de las mejores respuestas de niños para recordarte por qué los amamos tanto
A veces te sorprenderás de lo graciosos e ingeniosos que pueden ser los niños. Ellos vienen con las respuestas más honestas, lo cual es demasiado adorable.
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La inocencia de los niños no tiene precio. No existe mayor magia ni verdad que esa que se nos muestra a diario ante nuestros ojos de la manera más natural y genuina.
La inocencia de un niño no refleja ignorancia, ingenuidad o falta de madurez, refleja sorpresa, ilusión, imaginación, su limpia y maravillosa manera de ver las cosas. Es imposible enojarse con ellos porque su inocencia es demasiado preciosa.
Aquí hay algunos ejemplos de por qué los niños son tan adorables cuando dicen las cosas más honestas.
Fuente: Freepik
LA NIÑA QUE PUEDE DIBUJAR A DIOS
Una clase entera de alumnos de kinder estaba dibujando en su salón. La maestra decidió mirar alrededor y observar. Una de las niñas de la clase llamó la atención de la maestra cuando se concentró en su trabajo artístico. La maestra le preguntó en qué estaba trabajando.
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La alumna dijo: "Estoy dibujando una imagen de Dios".
"Pero nadie sabe cómo es Dios", dijo la maestra.
Entonces la niña miró a su maestra, suspiró y dijo: "Lo harán en un minuto".
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CONVERSACIÓN SOBRE BALLENAS
Una maestra y su joven estudiante estaban discutiendo sobre ballenas.
La maestra le dijo a la niña que era físicamente imposible que el mamífero se tragara a un humano porque a pesar de su gran tamaño, su garganta es pequeña.
El joven sostuvo que Jonás fue tragado por una ballena.
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Perdiendo la paciencia, la maestra repitió su argumento.
Después, la niña dijo: "Cuando llegue al cielo, le preguntaré a Jonás."
"¿Y si Jonah se fue al infierno?" Preguntó la maestra.
"Entonces le preguntas tú a él", respondió la niña.
UNA LECCIÓN SOBRE LOS DIEZ MANDAMIENTOS
Una clase de escuela dominical compuesta por niños de cinco años y de seis años discutía los Diez Mandamientos con su maestra.
Después de que ella explicara el mandamiento de honrar a tu padre y a tu madre, la maestra preguntó: "¿Hay algún mandamiento que nos enseñe cómo tratar a nuestros hermanos y hermanas?"
Un niño pequeño, que era el hijo mayor de su familia, inmediatamente levantó la mano y respondió: "No matarás."
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MAMÁ TIENE EL PELO BLANCO
En casa, un día, una niña pequeña observaba a su madre que estaba lavando los platos. Luego se dio cuenta de que su madre ya tenía algunas hebras de cabello blanco.
La niña le preguntó a su madre: "¿Por qué algunos de tus pelos son blancos, mamá?"
La madre respondió: "Bueno, cada vez que haces algo mal y me haces llorar o sentirte infeliz, uno de mis cabellos se vuelve blanco."
Por un momento, la niña se quedó en silencio. Luego le preguntó a su madre de nuevo: "Mamá, ¿por qué todos los pelos de la abuela son blancos?"
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EL PEQUEÑO BOBBY Y SU PROFESOR
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Un día, durante la clase, un profesor de ciencias estaba explicando cómo funciona la circulación de la sangre. Dio un ejemplo para aclarar las cosas. Él dijo: "Ahora, clase, si me parara sobre mi cabeza, la sangre como ustedes saben, se encontraría con ella y me pondría roja en la cara".
"Entonces, ¿por qué es que mientras estoy de pie en una posición normal, la sangre no corre a mis pies?", Continuó.
Uno de sus estudiantes llamado Bobby exclamó: "Porque tus pies no están vacíos."
Fuente: Freepik
MANZANAS Y GALLETAS
Era la hora del almuerzo en una escuela cristiana y los niños corrían hacia la fila en la cafetería. En la cabecera del mostrador, lleno de comida, había una enorme pila de manzanas. Junto a la pila había una nota que decía: “Toma solo una. Dios está mirando.
Mientras tanto, en el otro extremo de la mesa, había un montón de galletas con trocitos de chocolate.
Uno de los alumnos, un niño pequeño, decidió también escribir una nota y colocarla junto a las galletas. La nota decía: “Toma todo lo que quieras. Dios está mirando las manzanas.”
Fuente: Bored Daddy
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