"No, papi, por favor": mamá recuerda el desgarrador grito de niña antes de que su padre la matara

Gerardo Orozco llevado por la locura del alcohol y las drogas asesinó vilmente a sus dos hijos e hirió de gravedad a su esposa.

Era una noche normal en la casa ubicada entre las calles Ambrosio Figueroa y Joaquín Cortázar de la colonia de Chihuahua en México, alrededor de las 8 de la noche Gerardo estaba tomando unos tragos con algunos vecinos, su esposa Julia Yaneth Mata Barron estaba también en el sitio junto con sus dos hijos.

Cerca de la medianoche Julia decidió irse a casa de su suegro junto a sus niños, sin embargo los planes de Gerardo eran otros.

El hombre ya alcoholizado y bajo los efectos de sustancias psicotrópicas detuvo a su mujer y agarró a su hija llamada Leslie, obligando a Julia a volver, reseñó Diario MX.

SE DESATÓ EL INFIERNO

Ya en la casa Gerardo perdió el control y amenazó con matar a toda su familia, Julia asustada quizás pensó que eran sólo amenazas, hasta que el enloquecido hombre tomó un cuchillo y se aprestó a llevar a cabo lo que amenazaba.

Orozco atacó a su mujer hiriendola en un ojo, al dejarla malherida fue por su niña, la cual, según el testimonio de Mata Barron, le suplico “papi, no por favor” mientras el hombre la atacó con una violencia tal que después de sacarle los ojos con el arma blanca la rompió al hundirla en su cráneo.

El hombre también asesinó a su pequeño hijo que se encontraba durmiendo, Julia salió a pedir ayuda de los vecinos pero fue ignorada.

NO HAY SENTENCIA SUFICIENTE PARA PAGAR POR ESTE CRIMEN

Gerardo Orozco fue apresado y acusado de haber incurrido en los delitos de homicidio calificado y homicidio calificado en grado de tentativa.

Orozco es un padre desalmado que en medio de sus vicios se llevó por delante la vida de sus pequeños hijos y destruyó la de su esposa, la única sobreviviente del momento de locura del hombre.

Otro padre sin corazón fue el que lanzó a su hija del techo de su casa para evitar que lo desalojaran de su casa en el municipio de Joe Slovo en Kwadwesi, cerca de Port Elizabeth, la niña fue rescatada y el hombre fue arrestado.