Pequeño con 48 horas de vida desafía todo pronóstico y es ahora "un saludable niño de 2 años"

Un niño pequeño que solo tendría 48 horas de vida pasará la Navidad con su familia después de una sorprendente recuperación.

Eli Morgan, de Australia del Sur, a quien se le diagnosticó un tipo raro de cáncer, se sometió a un tratamiento que solo se administró como último recurso y ahora está en remisión. Los médicos descubrieron el crecimiento anormal en su pecho apenas dos días después de su nacimiento.

Sus padres probaron la quimioterapia pero no tuvo éxito y fue puesto en cuidados paliativos. "No tenía fuerzas, no podía pelear, así que como madre es mi trabajo luchar por él, así que eso fue lo que hice", dijo su madre Kodie Keed a 9News.

"Nadie debería tener que planear el funeral de su hijo, así que fue una de las cosas más difíciles que tuve que hacer".

En octubre pasado, a Eli se le dio la oportunidad de probar un nuevo medicamento. Su tumor se redujo a un tamaño que significaba que podía extirparse quirúrgicamente.

"Lloré, y lloré y lloré y lloré de alegría, alegría y alivio", dijo Keed. "Nunca jamás renuncies a la esperanza".

Los médicos tienen la esperanza de que la historia de Eli fomente una mayor investigación sobre la terapia farmacológica dirigida. El Dr. Christopher Kirby dijo que Eli ahora es un "niño normal de dos años".

"Creo que tiene toda una vida por delante", dijo el Dr. Kirby.La familia de Eli ha elegido compartir su historia para crear conciencia sobre la fundación del Hospital de Mujeres y Niños, en Adelaide, que les ayudó en su batalla.

AVANCE RÁPIDO

Eli, que ahora está en remisión, demostró ser un pequeño luchador después de someterse a una exitosa cirugía para que le quitaran el crecimiento.

Al compartir su historia, la madre quería que otras familias sacaran esperanzas de sus experiencias después de que Eli tuvo una recuperación notable.

ACUSAN A DOCTORES

Daniel Corrigan tenía apenas 44 días de edad cuando murió, luego de haber visitado el hospital en dos ocasiones sin recibir el diagnóstico que pudo salvarlo.

Una pareja del este de Ontario acusa a doctores del CHEO (Hospital Infatil de Ontario del Este, siglas en inglés) de negligencia, luego de que su bebé muriera, luego de haber ido a la sala de emergencias en dos oportunidades.