Su exesposo mató a sus dos hijos y 18 años después la justicia reconoce que cometieron un error

“Ahora puedo seguir adelante”, confiesa una madre argentina que perdió a sus dos hijos en manos de su vengativo exmarido.

Antes de que el crimen sucediera, Adriana García ya había denunciado a su exmarido y padre de sus hijos por violento, pero la justicia le falló y sus pequeños terminaron asesinados por aquel que debía protegerlos.

El 16 de octubre de 2000, Ariel Bualo degolló a Sebastián, de 4 años, y a Valentina, de 2. Pero fue nada más y nada menos que 18 años después de aquella fatídica época que la justicia aceptó haberle fallado a esta madre y a la comunidad.

La Suprema Corte reconoció que las falencias de la Justicia a la hora de "apreciar la gravedad del riesgo" que corría la pequeña familia determinó el fatal desenlace, reportó 0223.

El asesinato solo tuvo un motivo: Bualo quería vengarse de García, de quien se había separado en el mes de abril.

La fuente afirma que Adriana García había denunciado a su ex, y había solicitado a la Justicia argentina que supervisara las visitas porque temía que le ocurriera algo a los chicos. No fue escuchada y su peor pesadilla se cumplió.

EL DÍA DEL CRIMEN

El 16 de octubre de 2000, Bualo se llevó a los pequeños a la casa que ocupaba en calle Bouchard al 7200, del barrio Fortunato de la Plaza, los degolló y pasó la noche junto a los cuerpos. Al día siguiente, llamó a la policía y se entregó.

El Tribunal Oral en lo Criminal 3 de Mar del Plata lo sentenció a cadena perpetua por doble homicidio, agravado por el vínculo y la alevosía.

NO HABÍA ACABADO

Un tiempo después del crimen, Adriana demandó al Estado por daños y perjuicios, sosteniendo que, si la justicia y la policía hubieran atendido sus pedidos, el caso no habría terminado de esa manera.

Después de un largo período de tiempo, la demanda llegó a la Suprema Corte y el máximo tribunal de justicia bonaerense le dio la razón.

“He empezado a dormir, ahora puedo descansar”, concluyó.

En el fallo, emitido el 28 de noviembre de este año, los magistrados Eduardo J. Pettigini, Eduardo De Lázzari, Héctor Negri, Luis E. Genoud e Hilda Kogan reconocieron que la “incapacidad de apreciar la gravedad del riesgo de la situación en la que se enfrentaba" ella y sus niños determinó el fatal desenlace.

Estos personajes recalcaron las diferentes oportunidades en que García intentó buscar protección y ayuda.

Ellos vivían violencia familiar, golpizas, daños a su propiedad, conductas sexuales perversas, amenazas y García hasta fue arrojada de un coche en marcha

“La debida evaluación de la situación podría haber razonablemente evitado lo sucedido. El dictado de una medida de restricción de acercamiento, impedimento de contacto, cese de actos de perturbación, realización de evaluación y/o tratamiento psicoterapéutico o psiquiátrico, son algunas de las diligencias que pudieron adoptarse y que fueron soslayadas."

"Esas medidas, ya sea en su faz preventiva, represiva, asistencial, etcétera, debieron adoptarse sin la necesidad de esperar un pedido concreto por parte de la actora, los intereses comprometidos así lo imponían”, se señala en un párrafo del fallo."

“Los hechos oportunamente denunciados debieron ser debidamente investigados, evaluados: evidenciaban una situación de riesgo, una peligrosidad ostensible. Si efectivamente se hubiera procurado salvaguardar la integridad psicofísica de las víctimas, el fatal desenlace podría no haber sucedido”, recalcaron los miembros del tribunal.

ADRIANA NO SE LO ESPERABA

“Es una demanda que renovábamos cada año pero siempre supe que un segundo en la vida de las personas es un año para la justicia”, contó la mujer a 0223.

Durante los 18 años, 1 meses y 12 días que pasaron, Adriana repasó una y otra vez qué falló, qué no se hizo para evitar el crimen de Valentina y Sebastián.

Admitió que obtiene tranquilidad luego de que la justicia finalmente le dice que su pedido de protección no fue escuchado.

“Hoy puedo dejar de buscar en qué me equivoqué porque sé, y la Suprema Corte me avala, que los que no hicieron nada a tiempo fueron los fiscales María de los Ángeles Lorenzo, Carlos Pelliza y Fabián Fernández Garello. No hicieron nada cuando les fui a pedir ayuda. Quizás me faltó ir antes a los medios, hay muchos casos que se resuelven un poco más rápido gracias a la difusión periodística”.

UNA INDUDABLE VENGANZA

Ese día de octubre por la mañana, Bualo fue a buscar a los niños a casa de su ex esposa, diciéndole que los llevaría a saludar a la abuela (la madre de Bualo) y a jugar a un pelotero.

A la noche los chicos debían volver con su mamá. Pero no fue así.

En 2001, a lo largo del juicio de Bualo por su crimen, quedó demostrado que él programó el asesinato de sus hijos por venganza. Cada paso fue calculado con anticipación.

La fecha que eligió para los asesinatos es todo un indicador: un día después del Día de la Madre y dos antes del cumpleaños de su ex mujer. El 16 de octubre, cuando se llevó a sus hijos, el hombre le anunció a García: "Los chicos te van a dar una sorpresa para tu cumpleaños".