Mujer de 61 años trabajando tiempo completo dormía en cabina telefónica: no podía pagar alquiler
Una mujer de 61 años no identificada estuvo durmiendo en una cabina teléfonica del centro de la ciudad de Leicester porque no podía costear el alquiler de un lugar propio.
Ella no podía conseguir un departamento a pesar de tener un trabajo a tiempo completo en una fábrica. La anciana mujer eventualmente fue notada por una caridad de Lecister, que desde entonces le ha prestado su ayuda.
Corrie Moulds y sus colegas de "Help the Homeless Leicester & UK" lograron asistir a la desamparada mujer de 61 años, a pesar de que en un principio, demostró reticencia a recibir ayuda. Moulds, cofundadora de la caridad, conoció a la mujer en una de las muchas comidas semanales de la organización.
Las comidas suelen ser servidas a los desamparados de la ciudad en el mercado. Recordando la ocasión, Moulds dijo que "la había notado a ella un par de veces, e intenté hablarle y dijo que ella estaba bien, asumí que tenía dónde vivir y que sólo estaba ahí por la comida".
"Luego, hace como tres semanas, tomó una botella de agua caliente, así que le pregunté un poco más y pregunté si tenía dinero para calefacción, electricidad y eso, y dije que podíamos ayudarla si lo necesitaba. Fue muy tímida y evasiva, pero eventualmente me dijo que no tenía dónde vivir y que estaba durmiendo en una cabina teléfonica".
Moulds agregó que "me dijo que estaba trabajando a tiempo completo en una fábrica y que trabajaba turnos nocturnos cinco noches a la semana, cada vez que podía usaba su sueldo para quedarse en una posada, pero las noches que trabaja, termina su turno y duerme en una cabina telefónica un par de horas antes de pasar el día en cafés y librerías".
La mujer explicó a la cofundadora:
"No podía costear más que una o dos noches por semana un un hotel o posada, y dijo que no valía la pena ir después del trabajo. No podía creerlo cuando me dijo que dormía en una cabina teléfonica. No podía creer que sea una mujer trabajadora y haya terminado así".
La anciana vivía sola en otra ciudad antes de retirarse a los 60 años. Entonces comenzó a cobrar su pensión, pero al poco tiempo comenzó a tener problemas financieros y decidió buscar trabajo.
Sin embargo, debido a su edad, le costó conseguir un trabajo, y entonces se mudó a Leicester a quedarse con un pariente. Consiguió un trabajo en una fábrica en la ci9udad, con la intención de conseguir su propio lugar donde vivir.
Pasó el tiempo y descubrió que no podía con los costos iniciales de alquilar un departamento. Le costaba reunir lo suficiente para pagar el depósito y alquiler de un isitio lo suficientemente cercano a su trabajo.
La mujer comenzó a sentir que era una carga para su pariente, así que le mintió y dijo que había conseguido dónde quedarse, y se mudó. En ese momento comenzó a vivir en cabinas teléfonicas.
Moulds contó que "estuvo ahí por varias semanas. Es horrible pensar que llegó a ese punto para ella. Podría pasarle a cualquiera, y no debería ser vergonzoso pedir ayuda cuando la necesitas".
A partir de donaciones de miembros de la comunidad, la organización logró recaudar lo suficiente como para cubrir el deósito y primer mes de alquiler de una habitación en una casa compartida para la mujer. También le suministraron ollas y sartenes, muebles y otros enseres para su nuevo hogar.
Hasta ahora, la caridad ha ayudado a unas 20 personas a salir de las calles y conseguir un hogar. La caridad está en Facebook, bajo el nombre "Help the Homeless Leicester and UK".
En otro triste caso, un hombre quedó desamparado tras ser obligado a elegir entre su departamento y su perrito rescatado. El hombre tuvo que tomar una decisión imposible, pero incluso la amenaza de tener que vivir en la calle no fue suficiente para hacerlo separarse de su querida mascota.