Ana Lucía Salazar revela que fue víctima de abuso por un sacerdote

Son muchas las historias de pederastas religiosos contadas por anónimos, pero pocas han sido narradas por celebridades, víctimas de los abusos de un sacerdote.

La presentadora de espectáculos Ana Lucía Salazar, reveló que, en su época de colegio, en una institución de México, vivió la terrible situación de ser abusada por un sacerdote.

Contó que el hecho ocurrió cuando cursaba el segundo año de primaria, al tiempo que precisó dónde se encuentra su abusador y lo que podría pasarle ahora que hizo pública su historia.

“Entonces conocí al director del colegio, al sacerdote Fernando Martínez, quien en aquel entonces... este asqueroso no tenía la edad que tiene ahora, ya que la Legión de Cristo dice que ya es una persona de 79 años, que es de la tercera edad. ¡¿Y eso qué?!, ¡yo tenía 8 cuando me destruyó la vida!".

LA REVELACIÓN

La celebridad explicó que, a la edad que fue abusada, no tenía conocimiento de qué le había pasado y los peligros.

"Tenía 8 años, no medía bien los peligros, en mi mente no entendía lo que estaba pasando, cómo un sacerdote me estaba haciendo sentir que esto no era algo malo; estaba confundida y no sabía lo que pasaba.”

Ella no tenía conocimiento si era bueno o malo lo que el religioso le hizo a ella e incluso a niñas de menor edad.

“Ahorita ya tengo más de 30 y no me importa el qué dirán, como antes. No es fácil juzgar o decir: '¿Por qué hasta ahora?'.”

EL RESPETO Y EL MIEDO

Ana Lucía comentó que, en la escuela, a ese sacerdote lo veía como otro padre y que, por miedo de hablar, no sabía cómo detener los abusos.

Precisó que en la escuela le enseñaban a respetar y honrar a los sacerdotes y por obedecer no decía nada de lo que le ocurría. Ella no sabía nada de sexo.

Al contarle a sus padres, de inmediato le creyeron. “Mi papá fue a encarar a este pederasta y casi lo golpea, pero este tipo le pedía perdón de rodillas”.

“Hablando ahora con mi mamá, ella me dice que después de que yo les dije, ellos se movieron para sacarme de esa escuela y regresarnos a Monterrey; sin embargo, se atravesaron las vacaciones y se retrasó el proceso para cambiarme.”

ENCARAR A SU ABUSADOR

La conductora declaró que está lista para enfrentar a su abusador. Dice que le echaría en cara que destruyó su vida.

“Quiero que ellos mueran con eso, que los persiga hasta el último día de su vida, y no por odio, sino por justicia.”

Según lo expuesto por Ana Lucía, el sacerdote que abusó de ella y otras niñas en el colegio católico, ahora vive en Roma.

“Ojalá lo presenten ante las leyes para que pague, aunque sea un adulto mayor. Cuando hizo eso, tenía como 50 y tantos, entonces tiene que pagar su culpa, al igual que la ayudante de este señor, la maestra Aurora Morales González, quien era la que le llevaba a las niñas.”

“A ella la señalé apenas el 30 de abril y, casualmente, la desaparecieron de la escuela en la que trabajaba en Monterrey."

Y aunque la periodista rosa sabe que con encerrar a su pederasta no pagará el daño que le hizo, espera que eso sea lo mínimo que le suceda. “Nadie me va a poder devolver mi infancia, la cual mutiló".

LOS ABUSOS

Los abusos de los que la joven fue víctima cuando pequeña, ocurrían en el Instituto Cumbres de Quintana Roo, México. Ella dijo que Fernando Martínez fue el violador que la hizo vivir días de pesadillas.

“De pronto me encerró en las capillas. Yo, con las demás niñas fui por la eucaristía, y al terminar me dijo: ‘Ana Lucía, quédate conmigo para ayudar a recoger las copas’, y yo me sentía muy especial, como la ayudante del padre, pero ahí es donde este tipo comenzó a cometer los abusos.”

Ana Lucía llegó a Quintana Roo junto a su familia por el trabajo de su padre. Ahí terminó abruptamente parte de su infancia.

“Él decía que me quería mucho y que iba a ser mi amigo; me comenzaba a dar besos (...) son cosas asquerosas y muchas las tengo bloqueadas. Me sometió a una presión que no le deseo a ningún niño.”

A pesar de que su familia enfrentó la situación, debido al poder de la orden en México en aquel entonces, eludieron la responsabilidad. Para ella, el daño que le causó no prescribe.

RELIGIÓN GOLPEADA

La orden religiosa en México ha sido golpeada nuevamente por una denuncia por pederastia. La legión que todavía vive bajo la sombra de los abusos perpetrados por Marcial Maciel debe darle la cara a esta nueva historia de terror.

Ana Lucía Salazar se ha convertido en la primera mujer en el país norteamericano en denunciar públicamente por abuso sexual a un miembro de la congregación, el sacerdote Fernando Martínez.

“Tardas mucho tiempo en asimilar que tú no tuviste la culpa”, expresó Salazar al recordar su historia.

La conductora aseguró que fue víctima de abusos por parte del sacerdote entre 1991 y 1992, por el que era director del colegio de los Legionarios al que asistía en Cancún.

El año pasado, surgieron una serie de confesiones impactantes de varias monjas sobre abuso sexual por parte de sacerdotes, impulsadas por el movimiento #MeToo.

Una investigación de la AP encontró que han surgido casos en Europa, África, Sudamérica y Asia, lo que demuestra que el problema es global y generalizado, gracias a la tradición del estatus de segunda clase de las hermanas en la Iglesia Católica y su arraigada sumisión a los hombres que la dirigen. Conoce más detalles aquí.