Niño hace tarjetas de presentación a mano para promover el negocio de su mamá
En México un jovencito demostró todo el amor que siente hacia su madre ayudándola a promocionar su negocio con una tarjetitas hechas a mano.
La creatividad de este pequeño ha dejado a muchos con la boca abierta en Nayarit, México; pues entendiendo la importancia que tiene el ayudarla se encargó de dar a conocer a todos el negocio de alimentos de su progenitora.
Con emoción el pequeño entrega las tarjetas hechas por él mismo a los transeúntes que caminan por la zona, y les invita a visitar el humilde pero honrado negocio de su mamá.
CREATIVIDAD Y AMOR
El amor de un hijo a sus padres es algo que simplemente no se puede explicar más que con hechos tan dulces como estos, pues gracias a ese amor el niño se sintió impulsado a ayudar a su madre,.
Hechos con cartón y escritos con una letra que no se entiende muy bien, el pequeño convence a las personas de visitar la cafetería, además les añade un número para que puedan recibir los productos a domicilio.
Niño emprendedor │ Imagen tomada de: Pixabay
A cada una de las personas que el adorable pequeño se acerca, las logra conmocionar con su ternura y tenacidad para así captarlos, en las tarjetas se pueden leer los platos que ofrece su madre en el negocio, entre ellos burritos, quesadillas, jugos, y mucho más, como él mismo escribió.
Niño emprendedor pensando│ Imagen tomada de: Pixabay
IMPULSO EN REDES SOCIALES
Una de las personas que le emocionó la idea tan creativa del niño, decidió compartir una imágen de la tarjetita en Facebook, logrando viralizar al pequeño y a sus divertidas creaciones.
Ahora la madre del jovencito es conocida por miles de personas, y muchas de ellas ya han ido a visitar el lugar para tomarse un café o comerse un delicioso burrito hecho con muchísimo amor.
Esta familia es una muestra de que no hace falta tener mucho dinero para ser feliz, solo se necesita hacer las cosas con el corazón, así como otro niño encantador, pero esta vez de Nevada, realizó una acción totalmente hermosa para su madre, comprarle un auto debido que ella por ser de bajos recursos no podía costearse uno.
El jovencito inició por trabajar podando y limpiando los césped de las personas que vivían cerca de su casa, luego vendió uno de sus objetos más preciados, su Xbox, con el dinero ahorrado logró su objetivo para hacer feliz a su orgullosa e incrédula madre.