Mujer perdió sus extremidades tras contraer una bacteria durante el parto, pero no se arrepiente
Lindsey Hubley es una madre devota y sigue cuidando a su hijo a pesar de no tener manos, ni pies.
Se supone que el nacimiento de tu hijo se convierte en uno de los mejores momentos de la vida de cualquiera, pero para Lindsey Hubley, de Escocia, este día fue algo agridulce.
Su hijo Myles llegó sano al mundo, pero a raíz del parto Hubley contrajo una bacteria que causó la amputación de sus extremidades.
TUVIERON QUE SOMETERLA A UN COMA INDUCIDO
4 días después del nacimiento del pequeño Myles, Lindsey tuvo que ser ingresada de urgencia al hospital al presentar un cuadro de salud preocupante.
Sin emabargo, al llegar le dijeron que tenía estreñimiento, por lo cual volvió a su hogar. Pero 24 horas después la mujer recién parida estaba en un coma inducido para evitar complicaciones.
LA RAZÓN DE SU ESTADO
Durante el parto, Hubley tuvo un desprendimiento del perineo, lo cual no le permitirá volver a parir. Ademas, el equipo médico la suturó con parte de la placenta dentro de ella, lo que ocasionó Fascitis Necrotizante, una fuerte infección que se propagó por todo su cuerpo.
Lindsey por más de una semana en coma, y al sacarla de la inducción los doctores pensaban que iba a presentar deficiencia cerebral o incluso una muerte inmediata. Pero la madre al reaccionar lo primero que pronunció fue “Myles”.
TODO VALIÓ LA PENA POR SU HIJO
La extremidades de Lindsey se contaminaron, por lo cual tuvieron que ser amputadas, luego más de año y medio internada en el hospital. Su esposo Mike Sampson la acompañó en todo momento.
Actualmente Lindsey se encuentra fuera de cualquier peligro y disfrutando de los pequeños momentos de la vida con su familia. Para una entrevista.
“No hay un libro para esto”, dijo en entrevista la aguerrida madre.
Sin embargo recalcó que todo valió la pena por tener a Myles junto a ella; por eso agregó: “Haría todo de nuevo para tenerlo”.
Ahora los Hubley están demandando al Centro de Salud IWK de Nueva Escocia por negligencia medica, siendo los causantes principales del estado de Lindsey.
CUIDA A SU MADRE A PESAR DE SU DISCAPACIDAD
La historia de Cai Dongfeng también es igual de conmovedora. Tiene 75 años y vive en China, lo más sorprendente es su condición de discapacitada y de igual forma se encarga de cuidar a sus madre de 105 años.
Ella cuando tenía 10 años se vio complicada de salud, pero al no tener los recursos necesarios para tratarse, su situación empeoró y tuvieron que amputarle sus manos y pies.
Sin dudas ambos casos son un perfecto ejemplo que por los padres e hijos podemos hacer cualquier cosa, y para ello no hay excusa que valga.