Chiste: Hombre le cuenta al barbero los problemas que tiene para rasurarse en las mejillas

Un hombre entra a la barbería para rasurarse. Mientras el barbero le coloca la espuma, le menciona que tiene problemas para rasurarse en las mejillas.. Allí encontró una extraña solución, pues... ¡No se dio cuenta que no era el único!

El hombre visitó la barbería para afeitarse y el barbero se puso a trabajar rápidamente. Cuando comenzó a hacer la espuma en sus mejillas, el cliente decidió contar que simplemente no podía afeitarse adecuadamente gracias a la suavidad de su piel.

"Tengo lo que necesitas", dijo el barbero tomando una pequeña bola de madera de un cajón cercano. Luego, le indicó que se pusiera la pelota en la boca, entre la mejilla y la encía.

El cliente hizo rápidamente lo que el barbero le indicó, y él procedió con la rasurada más al ras que jamás haya experimentado. Eso hizo que sus mejillas se tensaran y, por lo tanto, se suavizaran, de modo que el proceso fue mucho más fácil y particularmente eficaz.

El cliente no podía estar más impresionado por el sabio movimiento del barbero y se preguntaba cómo había pensado en algo simple y tan inteligente.

La curiosidad finalmente lo venció, y decidió preguntar al barbero:

"¿Y qué ocurre si me lo trago?".

El barbero respondió rápidamente:

"No hay problema, solo tráigala mañana como lo hacen todos los demás".

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