Mamá de 25 años fallece tras usar batidos de proteína para perder el peso del embarazo
La obsesión por su físico llevó a Meegan a una muerte temprana que terminó salvando otras 4 vidas.
Llevar un estilo de vida saludable es algo fundamental, pero como todo, siempre hay límites; algo que Michelle White aprendió de una manera bastante trágica.
La abuela de 52 años estaba orgullosa del estado físico de su hija Meegan, madre de una niña y un niño; pero jamás se imaginó que el estilo de vida saludable de la chica de 25 años terminaría siendo fatal.
TODOS LOS EXCESOS SON MALOS
Meegan fue una madre joven, a los 18 años trajo al mundo a su hija Alexa, pero no dejó que su figura se viera afectada por el embarazo, así que se dedicó al fitness.
Según la señora White, su hija pasaba dos horas al día entrenando mientras cuidaba su alimentación tomando suplementos protéicos, todo por superar los kilitos demás que le dejó su segundo bebé, Liam.
Irónicamente su intento por llevar un estilo de vida saludable terminó matándola, pues el exceso del consumo de proteínas desató un Desorden de Ciclo de Úrea cuya existencia desconocía, lo que generó una acumulación mortal de amoníaco en su sangre.
SU MUERTE SALVÓ VIDAS
Michelle reveló que iba camino a recoger a sus nietos cuando recibió la llamada del colapso de Meegan, quien fue hallada en su casa desmayada.
Dos días después los médicos le dijeron a la señora White que era momento de despedirse de su hija. Así que Michelle con mucho amor tomó la mano de Meegan y le dio un beso en la frente.
Al ser desconectada del soporte vital, la familia White decidió donar sus órganos, salvando así la vida de 4 personas.
Esta acongojada madre confesó que su nieta también tiene el mismo desorden, pero que podrá ser controlado. También dijo que cuenta su historia para crear consciencia y evitar que otro incidente como este se repita.
Esto nos recuerda a Mary Derin, quien quedó ciega paralizada luego de unas vacaciones México, a sus 46 años de edad.