Ana María Aldón y la vez que quiso quitarse la vida justo después de ser madre
Ana María Aldón, esposa de José Ortega Cano, reveló ante las cámaras de ‘Mi casa es la tuya’ que quiso quitarse la vida hace varios años.
Luego de una pausa veraniega, ‘Mi casa es la tuya’ regresó a las pantallas con José Ortega Cano como protagonista. El extorero estuvo acompañado de su hija, Gloria Camila, y su mujer, Ana María Aldón.
Los esposos abrieron su corazón para hablar de los momentos difíciles que atravesaron tanto individualmente como en pareja.
Ortega Cano se pronunció sobre la muerte de su entonces mujer, Rocío Jurado, y del terrible accidente automovilístico que acabó con la vida de una persona.
Aunque Ana María se mantuvo discreta durante gran parte de la emisión, no dudó en develar que había intentado quitarse la vida por la presión que sentía en ese momento.
Luego de que la cantante y actriz Rocío Jurado falleció de cáncer pancreático, Ortega Cano cayó en una espiral oscura y sin fin de la que creyó que no iba a salir.
"Cuando murió cogí un bajón tremendo y la fe fue lo que me hizo seguir adelante, porque quería morirme, igual que ella."
Sobre el accidente que causó la muerte de Carlos Parra, en 2011, y por el que José fue condenado a prisión, el extorero admitió que "me arrepentí, le perdí perdón a la familia y cumplí mi condena".
LA FUERTE CONFESIÓN DE ANA MARÍA
Aldón relató la manera en que vivió ese momento en el que su esposo fue sentenciado, y la presión a la que los medios de comunicación la sometieron tanto por el crimen de su marido, como por el hecho de que estaba embarazada.
“No podía con tanta presión. Era un machaque continuo diario. No podía soportar eso, me quería quitar de en medio.”
Fue tanto el estrés que consideró quitarse la vida.
“De buenas a primeras te ves un día en un ‘embolao’ en el que se habla de ti, y nada bueno. Un día cogí el coche con la intención de suicidarme.”
En momentos, Ana María se mantuvo encerrada por días con el temor de encontrarse con la prensa que la acechaba.
“No sabía a lo que me enfrentaba. Me daba miedo hablar y salir. He estado diez días encerrada en casa porque había prensa.”
Según ella, ser una persona conocida no siempre es agradable.
"Es injusto, pero esas son las dos caras de la moneda de la persona que es conocida."
No podemos imaginar la cantidad de presión que esta mujer sentía en ese momento. Nos alegramos de que todo haya quedado en el pasado y que la pareja haya logrado superar cada obstáculo exitosamente.