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Mario Casas revela que debió ir a un psiquiatra para hacer uno de sus papeles

Karina Martín
24 nov 2019
20:27

Mientras para el público las películas son una forma de entretenimiento, para los artistas representan proyectos terminados que reflejan los grandes esfuerzos de sus trabajos, y Mario Casas lo demostró cuando contó lo difícil que fue para él interpretar uno de sus personajes.

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El reconocido actor español Mario Casas, ha demostrado que es un increíble actor con cada personaje que interpreta, pero no todos los papeles que ha tomado han sido fáciles de realizar.

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El artista que inició centrado en papeles de chico atractivo, como su personaje en la película de “Tres metros sobre el cielo”, o en la serie “El barco”, ha ido mostrando que tiene muchas más facetas como actor.

Poco a poco el actor ha conseguido dar un giro a su trayectoria y ha conseguido realizar papeles que han requerido de mayores esfuerzos por el grado de complejidad del personaje.

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De hecho, en el año 2017, Mario impresionó con su personaje en la película “El fotógrafo de Mauthausen”, para el que requirió hacer un cambio físico importante.

En el proyecto aparece con la cabeza rapada, desaliñado y hasta con una imagen poco saludable, debido a la extrema delgadez, y es que en la película interpretó a un judío encerrado en un campo de concentración nazi.

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Sin embargo, en el estudio de “Es Cine”, el artista confesó con Andrés Arconada, que uno de los personajes que más le ha costado ha sido el de Ángel, en la película de Netflix “El practicante”.

El personaje es un técnico en emergencias sanitarias que sufre un accidente a bordo de una ambulancia, que lo deja en silla de ruedas, lo que hace que su vida empiece poco a poco a desmoronarse.

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"Mi familia estaba deseando que acabase ese papel, estaba trabajando incluso con un psiquiatra para meterme en el personaje", confesó.

Mario explicó que para él fue muy difícil pasarse todo el día sentado en una silla de ruedas interpretando a un narcisista extremo que ”hace cosas inhumanas y no es capaz de empatizar con nadie”.

El papel le resultó tan complejo, que llegó a afectarlo personalmente porque no era capaz de dejarlo solo en el rodaje.

Mario Casas que ahora está promocionando su película “Adios”, recuerda que en el mundo del espectáculo no todo es glamoroso, y que su trabajo tiene dificultades como cualquier otro.

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