Ernestina Sodi, hermana de Thalía, logra un acuerdo con el repartidor al que atropelló
Ernestina Sodi y el conductor de moto al que atropelló el pasado 11 de enero ya llegaron a un acuerdo en el que ambas partes quedaron satisfechas.
El 27 de enero, Spem Soluciones emitió un comunicado detallando cómo quedó el asunto entre la hermana de Thalía y el motorizado de comida rápida al que se llevó por delante.
El 11 de enero, Ernestina transitaba por la colonia Bosques de las Lomas en Ciudad de México cuando chocó a un motorizado, destruyendo completamente la moto y causando algunos problemas de salud a la víctima Alberto Aguilar.
Ernestina sentada en el lugar del accidente. │Foto: YouTube / Tuitealo
Aguilar había declarado anteriormente que, cuando sintió el impacto, quedó inconsciente por unos segundos. Cuando reaccionó "yo estaba entre un carro parado, mi moto abajo del carro y el carro encima de mí".
Asimismo, aseguró que en Ernestina se encontraba bajo los efectos del alcohol, algo que supuestamente los vecinos de la zona también notaron.
Ernestina hablando con las autoridades. │Foto: YouTube / Tuitealo
Al principio, Aguilar comentó que Sodi se haría cargo de todos los gastos, incluyendo la reposición de la moto que quedó como pérdida total y los médicos. No obstante, ella dejó de comunicarse por un tiempo y sólo le entregó 5.000 pesos para solventar los gastos de la semana del accidente.
Ahora ha trascendido que el motorizado y la escritora finalmente llegaron a un acuerdo en el que ambos salieron contentos.
El comunicado, publicado el 27 de enero, asegura que Ernestina optó por pagar el valor de la motocicleta, debido a que la víctima no quedó satisfecha con la suma que la aseguradora le entregó.
Además, la hermana de Thalía cubrirá los gastos que emanarán de la falta de transporte. De ser necesario, Aguilar recibirá servicio médico por parte de la aseguradora, de acuerdo con las indicaciones médicas señaladas. Aquí puedes escuchar lo que opinó Laura Zapata sobre el accidente:
Esperamos que Alberto Aguilar pueda retomar su vida con normalidad y, en especial, el trabajo que realizaba con su moto como repartidor de pedidos con la empresa Rappi.