Mujer se queda en la calle con su hija de 2 años porque "okuparon" su piso mientras trabajaba

En Sevilla, España, una mujer se ha encontrado con una terrible sorpresa al regresar a casa. Cuando volvió de trabajar un grupo de personas se había hecho con su vivienda. Ahora ella y su pequeña no tienen adónde ir.

Paola Mancilla está en la calle con su hija de dos años en brazos. Se han quedado sin hogar meses después de alquilarle una habitación de su piso a una pareja que ahora la ha dejado fuera de su propia vivienda.

Al volver del trabajo, Paola se ha encontrado con que sus inquilinos se han apropiado del lugar y además lo están subarrendando a otras personas, publicó ABC.

La idea de arrendar una habitación de su piso surgió cuando comenzó la cuarentena y debido a las medidas de confinamiento cerró la hostelería donde trabajaba y se encontró sola con una pequeña niña y sin ingresos económicos.

Una pareja llegó a su casa y por la urgencia de su necesidad, la joven de 24 años los aceptó en su casa. Necesitaba el dinero para pagar la hipoteca. El acuerdo entre ellos fue meramente verbal y los problemas no tardarían en llegar.

“Ellos fumaban mucho, incluso delante de mi hija y les pedí que, por favor, lo hicieran en su cuarto, pero no hicieron caso. Aguanté hasta que pasó el mes y les pedí que se marcharan, entonces empezaron a insultarme y me amenazaron delante de la niña”, declaró al diario.

Mancilla se encuentra desesperada ante lo que está viviendo. Hace unos meses fue agredida por los invasores en su propia casa y al llegar, la policía tomó testimonio y pidieron que hiciera una denuncia pues no podían hacer más.

La joven nacida en Bolivia tiene poco apoyo pues aunque vive desde los 14 años en España, su hermano viaja constantemente. Además su madre se encuentra en su país natal y no puede volver por la prohibición de vuelos ante el COVID-19. Es ella la dueña del apartamento.

Los documentos los tiene en mano pero el panorama luce cada vez peor. Mientras se hospedó en casa de amigos pidió a los inquilinos que se marcharan luego del primer mes de renta que le habían pagado y así lo hicieron.

Pero antes de irse le dejaron otra sorpresa. El día en que se marcharon y ella pudo volver a su apartamento se encontró con que le habían alquilado el lugar hasta diciembre a otras personas que se niegan a irse a menos que ella les regrese el pago que hicieron a los inquilinos anteriores.

Paloma sigue rotándose para dormir con su hija en los hogares de amigos. Consigo lleva los documentos que aseguran que su familia es la propietaria del inmueble. Los tomó desde los primeros inconvenientes.

No solo emprenderá acciones legales para recuperar, sino también para que proceda la denuncia que hizo ante los inquilinos que la maltrataron y han puesto en esta situación. El caso está siendo investigado.

El movimiento ‘okupa’ va causando estragos en distintos lugares y afectando a cientos de personas con excusas inimaginables con tal de permanecer en lugares que no les corresponden.

En Barcelona, España, Lourdes Veiga lo está sufriendo. Desde hace cuatro años una mujer ha irrumpido en su casa y se niega a marcharse.

Incluso la misma policía ha dicho que la intrusa es una profesional de la ‘okupación’ que logra quedarse en los sitios por largo periodo de tiempo.

En la actualidad, Lourdes acumula tres demandas en contra de esta mujer que está ilegalmente en su propiedad, pero la historia tiene un giro aún más insólito.

Esta ‘okupa’ además ha dicho que demandará a la propietaria por encontrarse atentando contra su buena imagen y honor.