Lola Flores y la supuesta maldición de Isabel Pantoja por su relación con Paquirri
De acuerdo a la leyenda, todas las desgracias que vive la tonadillera surgen por una maldición que le habría lanzado Lola Flores, luego de ver a su hija sufrir por la relación entre su ex y Pantoja.
El último capítulo de “Hormigas Blancas” revivió una historia que tiene como protagonistas a las dos artistas mediáticas españolas, Lola Flores e Isabel Pantoja y que habla de su enemistad.
Según recordaron en el programa, todo empezó a finales de los años 70 cuando Paquirri, acudió al debut en Florida Park de su expareja, Lolita, de la mano de su nueva novia, Isabel Pantoja.
Carmen, la tía de Lolita, contó que todo pareció hecho con mala intención, especialmente de parte de la tonadillera, quien a su juicio se presentó “como diciendo aquí estoy yo y te lo he robado (a Paquirri)”.
Lolita lloró tanto ese día, que su madre no pudo evitar molestarse y fue en ese momento que aparentemente aseguró que Pantoja sufriría por el dolor que había causado.
“Te juro, y esto te lo dice una gitana, que el sufrimiento de mi hija un día como hoy lo vas a pagar toda la vida Isabel Pantoja”, le dijo Lola Flores a Pantoja, según afirmó Nuria Marín.
La cantante y bailarina española de flamenco Lola Flores 1965, Madrid, España. | Foto: Getty Images
Acto seguido, Lola se besó el pulgar sellando lo que pareció ser la promesa de una persona que además era conocida por tener ciertos dones que le permitían leer la mano y más.
Aunque en otra oportunidad la propia Lolita afirmó en “Viajando con Chester” que todo se trató simplemente de algo que dijo su madre en el momento, aún se le siguen atribuyendo a una maldición, todos los males por los que pasa Pantoja.
Cabe recordar que aunque la tonadillera ha tenido una vida repleta de fama y amor, a lo largo de sus años ha experimentado también mucha tristeza, conflictos familiares y hasta legales que siguen dando de qué hablar.
Incluso se ha llegado a publicar un libro relacionado con este tema, pero lo cierto es que sin importar cuánto se hable al respecto, probablemente nunca se pueda conocer realmente qué fue lo que realmente ocurrió.