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En busca de una ciudad perdida: la infancia aventurera de Maye Musk, la madre de Elon Musk

La madre de tres contó que sus padres la enseñaron a ella y a su hermana a ser aventureras y a probar todo tipo de cosas nuevas.

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Elon Musk es famoso por ser un espíritu libre y excéntrico en Silicon Valley. Y parece que eso viene de familia, pues su madre Maye Musk se embarcó en aventuras increíbles cuando era una niña.

La madre del magnate tecnológico dijo a CNBC Make It que cuando era pequeña, sus padres, que vivieron en Sudáfrica, eran muy aventureros.

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UNA CIUDAD PERDIDA

Allí, su papá, un quiropráctico llamado Joshua Norman Haldeman, estaba interesado en buscar la Ciudad Perdida del desierto de Kalahari, en África. Él llevó a su hija y a la familia a realizar caminatas anuales para buscar la ciudad perdida cada julio durante casi una década.

La historia sobre esta ciudad surgió a raíz de que el aventurero canadiense Guillermo Farini publicó un libro sobre su viaje a través del desierto, que cubre gran parte de Botswana, partes de Namibia y regiones de Sudáfrica.

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En el texto nombra “una ciudad una vez grandiosa y sublime, destruida por un terremoto, desfigurada por la explosión, arrastrada por la mano del tiempo".

El padre de Maye estaba enganchado con esta historia y su madre, Winnifred Josephine Haldeman, anualmente empacaba agua, comida y gas para partir en familia en su búsqueda, guiados por un mapa y una brújula.

La mujer de 72 años contó que pasaban tres semanas tratando de atravesar el desierto y su padre les decía a los exploradores que fueran a buscar a la familia con camellos si no salían del desierto según lo programado.

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UNA FAMILIA AVENTURERA

La familia viajaba durante el día y luego, por la noche, dormía en el suelo en sacos de dormir. “¿Te imaginas haciendo eso? Quiero decir, es una locura. Pero eran aventureros y cruzamos ese desierto”, contó Maye a CNBC Make It.

Maye recuerda haber visto muchos animales y haber conocido diferentes tribus de bosquimanos, algunos de los cuales, a fines de la década de 1950, nunca antes habían visto un automóvil.

La madre de Elon Musk señalo que estos nativos nunca habían visto a otras personas y había curiosidad de ambas partes, pero existía una brecha lingüística allí.

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Además, explicó que a ella y a su hermana Kaye, desde los 6 años aproximadamente, les asignaban turnos para caminar delante del vehículo familiar mientras se movía lentamente, y de esa forma evitaban caer en zanjas o tropezar con troncos que dañaran el automóvil.

Señaló que su hermana gemela le recordó que sus padres no parecían preocuparse demasiado.

“Éramos muy independientes y nos enseñaron a ser aventureras y a probar todo tipo de cosas nuevas. El lema de mi padre era 'vive peligrosamente, con cuidado'", dijo Maye.

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UNA MADRE LUCHADORA

Contó que ese lema le fue transmitido a ella y fue la forma en que crio a sus propios hijos.Tras pasar los años, se convirtió en madre de Elon, ahora de 49 años, Kimbal, de 47 y Tosca, de 46 años de edad.

Crio a sus hijos principalmente como madre soltera. Trabajaba por cuenta propia, haciendo malabares con el modelaje y una práctica privada como dietista. La familia se mudaba con frecuencia y a menudo estaba en apuros económicos.

Debido a su apretada agenda, los hijos de Musk tuvieron que aprender a ser autosuficientes desde una edad temprana. “Trabajaba muchas horas. No me veían mucho”, dijo.

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UNOS HIJOS AUTOSUFICIENTES

Afortunadamente, trabajaba desde casa, donde tenía sus prácticas, e indicó que ellos sabían que debían comportarse, hacer sus propios deberes y tomar sus propias decisiones.

Sin embargo, ella señaló que eso fue algo bueno en muchos sentidos. Su consejo número uno para criar niños exitosos es darles independencia y dejar que sigan su propio camino. A medida que sus hijos crecieron, todos hicieron exactamente eso.

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La madre de tres contó que Elon se dedicó a la física y se convirtió en empresario, al igual que Kimbal. Tosca se convirtió en cineasta. Además, señaló que tenían que hacer todo ellos mismos, como conseguir sus propias becas y sus propios préstamos.

Según ella, no tenía tiempo ni de leer un contrato, pero la independencia de sus hijos fue de gran ayuda para ella, y aseguró que ahora son muy felices.

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