El Tren Real en el que la realeza británica viaja desde hace más de 100 años
La reina Victoria fue la primera en utilizar este medio de transporte en el año 1842 y desde entonces ha ido formando parte de la historia de la monarquía británica y generando un gran interés.
Aunque actualmente los trenes no sean los medios de transporte más rápidos ni avanzados, siguen teniendo un atractivo especial.
Probablemente uno de los que cause mayor intriga en el mundo sea el tren que utiliza la monarquía británica para trasladarse en ocasiones especiales.
El llamado Tren Real ha transportado a la nobleza desde 1842, cuando la reina Victoria decidió utilizar este medio para viajar de Londres a Windsor.
Luego de esto otros miembros de la realeza han optado por viajar más seguido en él y han ido invirtiendo en detalles lujosos y sumamente interesantes que han garantizado la comodidad y el placer de quienes lo usan durante el recorrido.
Uno de los primeros arreglos del tren se realizó durante el año 1897, cuando la realeza decidió agregar seis vagones para incluir áreas de descanso, distracción, entre otros.
Actualmente el Tren Real posee nueve vagones que incluyen hermosos y cómodos dormitorios, baños, cocina, un comedor con capacidad para 12 personas, oficina y espacio para el personal que viaje con la nobleza.
Los vagones cuentan con aire acondicionado, calefacción y todas las comodidades que podría requerir su majestad. De hecho, su baño está tan bien equipado, que incluye bañera.
“Todo el mundo presume que el tren real es extremadamente lujoso”, contó la historiadora real Kate Williams, según reseña el medio Town & Country.
Los viajes en la locomotora no son los más rápidos pues hay límites de velocidad establecidos por la nobleza. Mientras los trenes más veloces del Reino Unido van a 200 mph, el Tren Real suele moverse a unas 70 mph.
Al transporte solo suelen entrar los miembros más importantes de la familia real, como el Príncipe Charles, la Duquesa de Cornualles o el Duque de Edimburgo. Pero por supuesto puede haber excepciones, siempre y cuando la reina lo autorice.
Aunque la monarquía británica cuenta con automóviles y aviones, el Tren Real sigue siendo uno de los medios de transportes más interesantes de la corona.