Cena de Navidad de la realeza: el menú y las tradiciones de la Familia Real británica

La Navidad es para compartir y reunirse con los seres queridos alrededor de una gran mesa, y la familia real británica cuenta con un tradicional y suculento festín para estos momentos.

La familia real británica se reúne anualmente para la celebración de la Navidad en la residencia de la reina Elizabeth II, en Sandringham, Norfolk. Y como la mayoría de la gente, disfrutan de un banquete con un menú clásico preparado especialmente para ellos por un chef.

Según fuentes, todos los años comen más o menos los mismos platillos, incluido el pavo. De este último se prepara una versión los adultos, uno para los niños, y otro para los empleados.

COMIDA PARA TODOS

Para comenzar el gran día, y luego de abrir los regalos en la noche anterior, la familia real solicita un desayuno completo estilo inglés, antes de partir a la iglesia. Luego de la misa dan paso a las fiestas de Navidad.

Durante la cena, tanto la familia real como los empleados gozan de un festín que incluye pavo y otros deliciosos platillos como puré de papas, coles de bruselas con tocino, cebollas y pudín, además de bebidas y mucho chocolate.

NO PUEDE FALTAR EL TÉ

El postre es una parte fundamental, por eso el pudín es uno de los emblemas del banquete. Está hecho con brandy para que el mayordomo lo flamee en la mesa.

Después de la cena navideña se acostumbra tomar el té en la residencia de la Reina, acompañado de pequeños sándwiches y pasteles de chocolate, además de un suculento pastel de frutas. Para culminar el festín, degustan una tabla de quesos finos, jamón York y foie gras.

LA CAMINATA

Luego de cenar, la familia real acostumbra realizar una caminata por los alrededores de Sandringham antes del tradicional discurso de la Reina para su pueblo.

Más tarde, la familia y todo el personal a su servicio se reúnen en el comedor para escuchar las palabras de Su Majestad. Todo este despliegue deja muy claro que a pesar de ser uno de los clanes más poderosos de Europa, sus costumbres no son tan distintas a las de una familia cualquiera.